• miércoles 01 de agosto de 2012 - 12:00 AM

De Juan Hombrón a Punta Chame

Corren como pólvora los líos de la venta de tierras del Estado a manos de unos pocos. Todo aquel que pensó que lo de Juan Hombrón se ter...

Corren como pólvora los líos de la venta de tierras del Estado a manos de unos pocos. Todo aquel que pensó que lo de Juan Hombrón se terminaba con la absolución de Villamonte se equivoca, ya apareció Punta Chame con casi los mismos actores y vendrán más.

Una ley que aprueban con el beneplácito de la población y que apuntaba a resolver el problema de la tenencia de tierras por parte de pequeños campesinos terminó siendo la rebatiña de inescrupulosos que utilizando el poder del dinero y el engaño se apropian de las mejores tierras costeras con el subterfugio de entregar títulos de propiedad a quienes no lo tienen. Hay que ser canalla para aprovecharse de la necesidad ajena y mal utilizar una ley que fue reformada con propósitos nobles. La herencia de Villamonte dará para largo, aparecerán después Santa Catalina, Pedasí, las costas de Colón tanto Costa arriba como Costa Abajo y todo aquello que apunte o huela a costa que mañana le puedan sacar beneficios económicos de gran alcance para construir resorts y dejar a los humildes panameños sin acceso a las playas, con lo cual el mandato constitucional de que las playas son públicas será un canto más a la bandera.

Que banda de ruines y pillos encorbatados nos han tocado, ponen en estos puestos a quienes les hacen los mandatos sin ningún tipo de tapujo ni respeto a los mandatos legales y constitucionales.

Tenemos que prepararnos para demandar todos estos actos e intentar salvar lo que nos dejen en el país, en mi mediana vida he visto gobiernos y gobernantes llenarse, acomodarse, robar, etc. pero como estos ninguno; por supuesto que en el gobierno actual hay excepciones, pero no son muchas tampoco, los militares fueron niños de pecho.

El Frente por la Democracia se ha comprometido a solicitar una auditoría internacional que investigue los costos de todas esas megaobras y sus resultados serán públicos. Además de revertir todo aquella propiedad o bien que sea producto de chanchullos al patrimonio nacional. De igual manera denunciaremos a todas estas empresas internacionales que se encuentran construyendo obras y que sus países son firmantes de acuerdos sobre buenas prácticas y contra la corrupción. Ninguna de estas empresas es capaz de hacer en su respectivo país lo que hoy hacen en Panamá, porque las sanciones económicas son demasiado fuertes; sin embargo como de todo hay en la viña del Señor aquí ganan licitaciones, hacen contratos directos corruptos, pagan las coimas 10% en prepago y ni siquiera eructan.

*EX SECRETARIO GENERAL DE LA CGTP