Han transcurrido los primeros 15 días del Gobierno de José Raúl Mulino, y la frase célebre que caracterizó su discurso de asunción al poder el primero de julio de 2024 dejó en la mente de los que lo escuchamos el mensaje “estamos mal, pero la cosa pinta bien”.
Un mensaje esperanzador, frente a la realidad en que fue entregada la Cosa Pública por la administración saliente, en medio de escándalos, malos manejos y una transición con cifras cosmética manipuladas que riñen con la realidad actual.
Esta semana diversos ministros de Estados han decidido solicitar una auditoria para las dependencias que regentan para que quede claro la realidad en que se están recibiendo los bienes del Estado, y la forma en que fue encontrada la cartera dirigen.
Por su parte, el presidente José Raúl Mulino anunció al país que, a partir del 18 de julio de 2024, se hará una conferencia de prensa semanal, donde responderá las interrogantes de los medios y de la población sobre temas nacionales.
Esta medida nos parece oportuna, ya que permite seguir los canales de comunicación estrechos entre el gobernante y los gobernados.
Acabando con la práctica inusual que el jefe de gobierno no sepa que decir, o entre en una retórica filosófica que solamente ocasiona el mareo de la población. En otras palabras, donde dice mucho y no dice nada.
Las primeras dos semanas de gobierno, se han caracterizado por dar pasos firmes, donde el equipo que acompaña al inquilino del Palacio de las Garzas se ha centrado en olvidarse de las Burbujas del Champagne a diferencia de otros gobiernos, y poner en ejecución un plan para sacar al país del atolladero en que se encuentra empantanado.
Si nos taca en estos momentos evaluar los primeros días de mandato, respondería con la frase del presidente José Raúl Mulino “estamos mal, pero la cosa pinta bien”.
El país entero espera que el liderazgo del gobernante motive al pueblo entero a remar como un solo hombre el barco de la nación panameña, donde los objetivos de bienestar, de estabilidad, y de bonanza lleguen a todos.
