Estamos doblados por tantos golpes bajos

Pablo pueblo se siente indefenso, nuestro tinglado está más caliente que nunca por el embate de los cacos que siguen conectando sus potentes golpes bajos, llenando de luto a más hogares panameños. En esta división de la inseguridad reina un trompadachín sin pegada, que no tiene un plan definido de combate y que su principal arma es dar excusas.

Muchos desde hace meses vienen pidiendo que tire la toalla, porque por lo visto no está rindiendo lo que la afición esperaba. Llegó a la cima con bombos y platillos, ahora se encuentra en lo más bajo del ranking local, es una verdadera lastima esta situación.

La fanaticada mira con espanto lo que ocurre en nuestro tinglado, la velada de terror en el Casco fue noticia a nivel internacional, eso deja mal parado al box del patio. El veterano que tiene apellido de arbolito de Navidad, al parecer, no se da cuenta que no tiene las cualidades para portar tan importante cinturón en nuestro medio.

Lo volvemos a decir, Pablo pueblo se siente al borde del nocaut, ya no solo vive asediado por la cuadra de los cobradores, sino también por los cacos que con sus combinaciones los atormentan. La afición paga los platos rotos.