Así vemos, como diputados fariseos cada que vez que intervienen pretenden hablar de Dios, mientras permiten que los sectores poderosos económicos se lleven $1,000 millones de la CSS de forma directa, y dejan que los bancos estatales, con gerentes que vienen del sector privado, externalicen o tercericen los restantes $9,000 millones, colocando los fondos de pensiones en manos de la banca privada que tanto lo querían.
Fariseos políticos, atacan a los pocos diputados valientes, sobre todo a las damas que han enfrentado a sus bancadas, para defender al pueblo de la maldad que hacen en la ley.
Para todos los diputados que votaron en contra del mamotreto maligno nuestro respeto. Para los hipócritas y mentirosos que hasta cálculos ridículos hicieron para justificarse en medios, nuestro repudio. Para los que atacaron a las diputadas por su independencia real, ya tuvieron el reto de vestir prendas femeninas, para igualarse y pelear con ellas, las heroínas del hemiciclo.
No importa las ataquen los sicarios periodísticos e “influencers” de alquiler, el pueblo sabe quiénes lo están defendiendo y quiénes se vendieron a sus donantes de campaña y poderes económicos.
El balón ahora lo tiene el pueblo, las bases de los gremios y los ciudadano decentes. ¡Nos están robando el país y descaradamente ya reconocen que parte de la plata que pone el gobierno viene otra vez la sucia mina!