- jueves 21 de noviembre de 2024 - 10:20 AM
El Metro es un símbolo de la irresponsabilidad y el paternalismo
A mis manos llegó un video donde se veía al diputado Ernesto Cedeño en un recorrido por las instalaciones del Metro. El caballero escuchaba las quejas de los usuarios relacionadas con escaleras eléctricas dañadas y le ineficiencia en algunos elevadores. No sé cuál era la intención del diputado, pero le envié un mensaje a su celular.
Le dije que, de continuar el paternalismo con el costo del pasaje, el deterioro se irá acrecentando. El precio fijado por este servicio fue de 35 centésimos para la línea uno. Así lo expresó Martinelli en plena campaña electoral y que luego se oficializó mediante el decreto ejecutivo 367 de mayo de 2014.
Los estudiantes pagan la mitad, es decir 17 centésimos y solo tendrán derecho a dos viajes por día. A los jubilados se les cobra 24 centésimos para cumplir con la ley sobre descuentos. Varela puso el pasaje a 50 centésimos en la línea dos.
Y viene la pregunta para el diputado Ernesto Cedeño... ¿Con estos precios de baratillo podrá el Metro atender, como se debe, el mantenimiento de las infraestructuras? Según informes oficiales, con la tarifa actual, la empresa estatal solo alcanza para sufragar los gastos del 50 por ciento del mantenimiento de la línea uno y dos del Metro.
Reconozco la importancia de este transporte masivo, pero el expresidente Martinelli cumplió a cabalidad la frase que dice... “lo que nada nos cuesta hagámoslo fiesta.” Y me imagino que algunos se preguntarán si esa misma política la aplica en la cadena de sus supermercados. ¿Qué hacer ahora cuando acostumbramos a una población al paternalismo salvaje? Se atreverá este gobierno a aumentar el pasaje del Metro y de asignar un pasaje justo a la línea 3 que ya lleva un avanza superior al 70 por ciento.
Todos los días lloramos por la situación económica de la nación. Escuchamos comentarios sobre la deuda abultada, pero la mayoría de las administraciones presidenciales ha actuado de forma irresponsable. Pareciera que buscan aplausos y se olvidan que fueron elegidas para actuar como estadistas, no como Santa Claus. Abrazos y que Dios nos bendiga en este jueves soleado.