Después de un tiempo

Una tarde-noche hermosa del mes de mayo, cuatro señoras nos reunimos por voluntad propia a leer y comentar cuentos y poesía.Una de ellas llevó a la conversación el poema Después de un tiempo, cuya autoría por algunos años se le atribuyó al gran escritor argentino Jorge Luis Borges siendo su autora real la poetisa estadounidense Verónica Shoffscall, nacida el 24 de septiembre de 1952, quien falleció recientemente, en febrero de 2024.

El poema Después de un tiempo ha viajado por el mundo y no fue hasta 1980 que se le dio el crédito de la autoría de este famoso y reproducido poema.

Esta autora aportó sus habilidades en la escritura de una forma especialmente grande: vivió una vida al servicio del prójimo y de forma desinteresada.

Servía a la comunidad Baha’i Faith mundial (el bahaísmo), escribiendo y editando un boletín mensual sobre las actividades de este grupo.

Fue una mujer con una vida sencilla y un rostro afable que tuvo que ver cómo la autoría de su poema se le atribuía a una y otra persona y, en ocasiones, que esta fuera una persona famosa (Shakespeare, Borges, etc.).

Una de las reflexiones de esa entretenida tarde es que, en el terreno de la fantasía, me parecía que con una vida tan altruista y alejada de la fama estaba segura de que esta gran mujer estaba por encima de egos y, si bien es cierto que era justo que se le diera el crédito de su trabajo, su mensaje llegó ―aun sin conocerla― a millones de personas, quienes se sensibilizaron con su letra, y eso es realmente lo importante.En un mundo de protagonismos, esta historia hace la diferencia.