- martes 01 de noviembre de 2016 - 12:00 AM
Cosecha abundantes bendiciones
un hombre envió a sus cuatro hijos a conocer un árbol en lugar lejano, pero a uno en otoño, otro en verano, otro en primavera y al último, en invierno. Al regresar, uno habló de un árbol lleno de flores; otro, de un árbol seco; el tercero, de un árbol sin futuro porque perdía sus hojas; y el otro habló de un árbol congelado, horrendo e imposible de cosechar. Y así nos ocurre muchas veces en la vida, pues Jesús advierte de nuestra limitación para ‘discernir las señales de los TIEMPOS' (y TIEMPOS en la Biblia significa OPORTUNIDAD). Mira, cuando Moisés envió espías a la Tierra de Canaan, vieron una tierra de tal abundancia, que ‘cortaron un sarmiento con un racimo de uvas, el cual trajeron dos en un palo'. Pero, la mayoría también vio ‘un pueblo fuerte, grande, ciudades fortificadas y gigantes', es decir: una tierra imposible de conquistar. Sólo Caleb y Josué, dijeron: ‘subamos contra ellos, nosotros podemos más, no se rebelen contra el Señor, Él está de parte nuestra'. ¡Pocos vieron la OPORTUNIDAD! ¿Y tú? ¿Tienes un problema gigantesco? ¿Tienes un sueño inalcanzable? ¡Nadie lo niega! Pero, ‘no te rebeles contra Dios', no te opongas, no le digas no a la OPORTUNIDAD que Él te ofrece ‘de manifestar Su Poder', de actuar a tu favor. No te prives de la OPORTUNIDAD de ver flores, de cosechar abundantes bendiciones como aquel ‘racimo de uvas que trajeron dos en un palo' desde una tierra gigantes e imposibles… ¡que ‘tú puedes conquistar'!
NÚMEROS 13:30 ‘¡…podemos conquistarla!'