- miércoles 18 de septiembre de 2019 - 12:00 AM
La corrupción es como el comején
Tristemente el endémico mal de la corrupción no es nada nuevo ni en nuestro país, ni en ninguna parte del mundo y tampoco se trata de que sean corruptos solo quienes reciben las dádivas de quienes pretenden hacerse de algo, aunque lícitamente no les corresponda, sino que igual de corrupto es quien ofrece la dádiva como quien la apadrinan mirando para otro lado, sean estos funcionarios, jueces o magistrados, banqueros, diputados etc. que sabiendo donde es que come la langosta, no hacen nada para tapar esos agujeros y lo peor de todo el negocio es la impunidad con la que actúan puesto que no hay quien ponga orden.
Todos nos ponen los buenos ejemplos de las legislaciones de otros países, en torno al castigo ejemplar a quienes corrompen o se dejan corromper, pero cuando se trata de hacer algo, de una aparecen los defensores oficiosos, porque no existe la verdadera voluntad política de atacar el problema de raíz.
Cuando el corrupto es un altísimo funcionario, un ‘gran empresario', un togado, etc., no hay forma de procesarlo y peor, si es un diputado porque tienes que presentar la prueba idónea; como si los corruptos andan dejando huellas por cualquier esquina para que luego los atrapen; sin embargo, aunque con falencias, el Ministerio Público han demostrado o al menos ha puesto al descubierto algunos casos que, aunque para la población en general eran secretos a voces llaman la atención.
En el más reciente caso, acaban de solicitar procesos para casi 60 personas, en la cual hay de todo como en botica, pero en su gran mayoría la red solo agarra chogorros, puesto que los verdaderos peces gordos, como siempre, aunque les tranquen las puertas se salen por la ventana y si les cierran las ventanas se salen por las rendijas y que sigua el fiesto.
Por amor a la patria ya dejen de joder y pónganse serios, porque si no atajamos esta gangrena, terminaremos perdiendo lo que aún nos queda de país y para ello la ciudadanía con el apoyo de los medios de comunicación social tanto los tradicionales como los alternativos tenemos que seguir presionando y denunciando, a cuanto ladrón se nos atraviese en el camino; sin importar su posición o estrato social, porque nuestras futuras generaciones que son el hoy de la patria así lo demandan y no podemos ni debemos heredarles un país corrupto. Detengamos el comején.
EX SECRETARIO GENERAL CGTP