El contraste entre la publicidad y propaganda

Muchos confunden los términos publicidad y propaganda, dándole una connotación de sinónimos, por ello, es necesario señalar que su diferencia radica en el objetivo con que cada una comunica su mensaje.

La publicidad tiene fines comerciales, promueve productos y servicios con el objetivo de atraer a potenciales clientes o compradores y llevarlos a adquirir aquello que determinada marca vende u ofrece. Por su parte, la propaganda promueve campañas de corte ideológico, político, educativo, de concienciación, para generar un impacto en el público que modifique su conducta u opinión en relación con determinado tema.

Panamá es parte del engranaje generalizado de los países que ven la publicidad como propaganda. Es común ver en los medios tradicionales de comunicación social y a través de las redes sociales como se menciona el término publicidad estatal.

La línea que separa a la publicidad y a la propaganda es tan delgada como la tela de araña y por eso, suelen confundirse pese a que las dos difieren en significados y usos; son herramientas mediáticas que comparten los mismos medios de difusión.

Existe un debate de vieja data entre los entendidos y especialistas de la publicidad y cada uno presenta argumentos de peso que parecen dar a entender que están más lejos que cerca.

La publicidad siempre será capaz de generar necesidades inexistentes en su público con un fin económico y comercial. Mientras que, la propaganda es una acción informativa a través de la cual el principal objetivo es manejar las actitudes de los individuos frente a ciertos temas.

PUBLICISTA Y DOCENTE.