- domingo 02 de marzo de 2014 - 12:00 AM
El Carnaval del 2014
Para el panameño cuando llega Carnaval es el momento de relajarse, desconectarse de todo. Un alto porcentaje de la población se va hacia el interior del país, el resto se queda en la ciudad capital.
El panameño de una u otra forma disfruta de los días de asueto; las iglesias organizan retiros espirituales, otros aprovechan para compartir en familia y muchos participan activamente de las fiestas de Carnaval.
Sin embargo ¿qué implica y qué tiene de diferente este Carnaval 2014?
En este año electoral, habrá derroche de todo en estos Carnavales, pero ante esta situación podemos decirles, ‘si tomas no manejes’, ‘usa preservativos,’ ‘evita un embarazo no deseado,’ sólo por mencionar algunos lemas de prevención.
En los medios de comunicación he escuchado la propuesta de ‘educación sexual para estos carnavales es la abstinencia, la fidelidad y el uso del condón para prevenir VIH y otras infecciones de transmisión sexual’.
Disfrutemos estos Carnavales conscientemente, siempre pensando que son sólo cuatro días, pero una conducta desmedida, podría tener consecuencias para toda la vida.
Aún me sigue llamando la atención que los jóvenes y otros no tan jóvenes empeñan hasta lo que no tienen para ir a carnavalear.
Todo inicia el viernes con la coronación de las reinas, luego el sábado, domingo, lunes y martes entre culecos y diversión se hacen estos Carnavales mejores conocidos como la Fiesta del Rey Momo.
Los tradicionales culecos, desfiles de carros alegóricos en donde la reinas y las princesa muestran todo su esplendor en estos días hasta que llegue el muy triste entierro de la sardina, en donde culmina una de las fiestas más esperadas por los panameños y turistas que visitan los populares y reconocidos carnavales de Panamá.
En provincias centrales, el Miércoles de Cenizas se realiza a las 5:00 a.m. el ‘topón,’ en donde se queman grandes cantidades de cohetes en los parques, y las tunas a pié con sus reinas empolleradas, dan lo mejor de sí, indicando la finalización del Carnaval. En este ‘topón’ se miden fuerzas entre las tunas y cada una se siente triunfante.
La fiesta del pueblo no queda ahí, muchos esperan los carnavalitos que son el sábado y domingo de la siguiente semana después del Carnaval.
Luego, de vuelta a la rutina, los niños y jóvenes vuelven a clases, los demás regresamos a las labores diarias. Este es el Carnaval panameño, parte de nuestras tradiciones.
A nuestros simpatizantes y seguidores no hay tiempo que perder el éxito está cerca y depende de cada uno de nosotros. Continuemos con nuestro recorrido de casa en casa compartiendo con las familias el plan de todos para que en las elecciones estemos informados y tomemos la mejor decisión.
* EXCANDIDATA PRESIDENCIAL DEL P.R.D.