Ante problemas nacionales, ¿elecciones normales?

Por tratarse de problemas propios del sistema, la vivienda, salud, educación, seguridad pública y el desempleo, sobreviven a todos esfuerzos y programas de los gobiernos. Al acercarse las elecciones todos sentimos como que si en los últimos cinco años transcurridos, esos temas hubieran alcanzado su máximo nivel de complicación.

Por tal razón, les cuesta mucho a los sectores oficialistas que la ciudadanía perciba las bondades de su gestión, en tanto que los opositores sólo tienen que mostrar las cifras y las estadísticas que hablan de miseria, hambre y marginalidad, para alcanzar ciertas ventajas en las preferencias del electorado.

La situación en el presente no cambia, pues las figuras de los últimos gobiernos, por cuyos excesos y arbitrariedades terminaron sentados en el banquillo de los acusados, hoy se presentan vestidos con ‘pieles de cordero', el desastre que ellos mismos provocaron. Como pintan las cosas, tendremos unos 8 candidatos presidenciales, tanto independientes como partidistas, que el electorado espera con ansias, para ver cómo unos a otros, ‘se sacan los trapos'.

Pero, no tendremos que esperar tanto, porque las cosas que se está dando desde los momentos preliminares, nos indican que estas elecciones estarán llenas de sorpresas. No se han vencido los tiempos para la conformación de las alianzas y duplas electorales, y ya se han dado algunas rarezas, que calentarán el ambiente.

Puede ocurrir, que alguno de los candidatos se vea involucrado en un lamentable problema de tipo familiar, financiero, o de salud, con incidencia en su continuidad en la carrera electoral. Pero, cuando a uno le es cuestionada ante los tribunales su capacidad jurídico política para ‘correr', y a otro se le pueda invalidar su postulación por incompatibilidades constitucionales, el panorama se enreda más .

En otras elecciones, la polarización electoral se daba entre ‘opositores y oficialistas', lo que facilitaba la conformación de las alianzas. Los gobiernistas son fáciles de precisar, y con todo y eso es compleja su consolidación. Pero, lo es mucho más identificar a las figuras de la llama oposición, pues todas se sienten poseer méritos y galardones suficientes, para aceptados por un electorado confundido.

JUBILADO