- lunes 07 de marzo de 2016 - 12:00 AM
Alerta de virus
Un nuevo mosquito, cepa o alimaña ha venido a sumarse a la larga lista de vectores que hacen sus delicias en las empozadas aguas de nuestros basurales, y es la del zika, del cual escuchamos a diario que sus víctimas aumentan.
También a diario vemos, tanto en las barriadas más elegantes como en las más olvidadas, la basura que se acumula por días, donde hay toda clase de desperdicios, mezclados unos con otros, como si la cultura del reciclaje no se nos hubiera inculcado, después de tanto tiempo de estar remachando sobre él.
Actualmente se recicla en el aeropuerto, en las universidades, en otros lugares públicos y es muy fácil adoptarla en casa y edificios porque sitios donde llevar estos desperdicios abundan en la ciudad.
Incluso hay quienes se hacen de sus cuantas monedas recogiendo solamente las latas.
El tema del zika puede amenazar incluso la llegada de turistas, que es una de las industrias que más se deben cuidar porque en ella se juegan muchos puestos de trabajo y la imagen de nuestro país. Los mosquitos que transmiten este virus se sumergen en la misma agua empozada que el dengue, y el chikungunya, por lo que es importante eliminar estos criaderos de mosquitos (que se originan primordialmente en la basura pero también en macetas, potes o cualquier lugar donde se acumule agua, como entre llantas) y fumigar lo más que se pueda.
Nuestro país ha sido desde tiempos de antaño foco de enfermedades y recordemos que de aquí se erradicó la fiebre amarilla y la malaria gracias al trabajo del Dr. William Gorgas, una vez los estadounidenses entraron a construir el canal, no sin la ayuda del médico cubano Carlos Juan Finlay. Aseo, prevención y sobre todo fumigación fueron y son la clave para que las larvas no prosperen y el virus no se extienda.
Coadyuvemos todos a que Panamá no sea un país insalubre y sucio, tanto para nosotros como para los demás.
*Exministra de Gobierno y Justicia