- martes 17 de septiembre de 2024 - 12:00 AM
El presidente de la República anunció diálogo sobre la Caja de Seguro Social (sobre el programa IVM y sobre las prestaciones médicas), a partir del lunes 16 de septiembre, así como dio un plazo a los participantes, hasta el 31 de octubre para presentar propuestas sustentadas financieramente.
Previamente, había llamado a reuniones en la Presidencia, a dirigentes de partidos políticos, sector privado, trabajadores y gremios magisteriales, invitándolos a una “cruzada nacional para salvar la Caja”.
La situación actual es crítica, pues el sistema de pensiones tiene un déficit de $ 673.5 millones en el subsistema de beneficio definido al cierre de 2023, del cual dependen 310,755 jubilados y pensionados, por un lado. Por el otro, hay crisis en el sistema de atención de la CSS, que implica desabastecimiento de medicamentos, mora quirúrgica, falta de insumos, retraso en las citas, entre otros problemas, donde son afectados cerca de 3 millones de asegurados.
Lo cierto es que ha habido total displicencia en la gestión de la CSS por parte de los diversos gobiernos, donde se ha permitido una alta morosidad del sector privado y estatal en el pago de cuotas, ni hablar de la evasión fiscal que afecta la prestación eficiente de los servicios públicos en general y de la salud en particular. Así como tampoco se ha cobrado el 10% de las utilidades por las concesiones de fibra óptica en las telecomunicaciones, que debe ser destinado a la Caja. Según OIT, Panamá aporta menos del 0.2% del PIB a las pensiones, a diferencia de otros países que aportan significativamente más, como Brasil con un aporte del 9.6% de su PIB.
Ya sectores sindicales y gremiales han manifestado claramente que no aceptarán medidas paramétricas; y condicionan su participación en dicho diálogo a que sea inclusivo de todos los sectores, se defina previamente la metodología, facilitador y contenido del diálogo, y que sus sesiones sean transmitidas por los medios. Anunciaron presentar propuesta unificada y marcha para el 17 de octubre. Se entiende su desconfianza hacia el nuevo director nombrado, dada su vinculación con las aseguradoras, sus planteamientos a favor de las paramétricas y privatización de la CSS y su participación en las reformas del 2005 a favor de la división del sistema de pensiones.
La varita mágica de las medidas paramétricas sólo implicaría que los platos rotos de la Caja lo pagara el pueblo trabajador. ¡Todos y todas a defender la CSS!
