Caballos salvajes reviven en España

En un encinar cerca de la frontera entre España y Portugal, el visitante descubre una imagen antigua: caballos salvajes, sin herraduras ...
  • lunes 17 de marzo de 2014 - 12:00 AM

En un encinar cerca de la frontera entre España y Portugal, el visitante descubre una imagen antigua: caballos salvajes, sin herraduras ni silla, trotando en libertad como hace siglos, antes de que los conquistadores españoles los llevaran a América.

Con el declive de la agricultura en España los campos se vacían, dejando lugar al regreso de especies salvajes, explican los ecologistas.

Así, en la reserva biológica de Campanarios de Azaba, en el oeste del país, se soltaron decenas de caballos Retuerta en los últimos dos años.

"Es un caballo formidable que se ha mantenido desde tiempos inmemoriales", pese a su peligro de extinción, afirma Carlos Sánchez, responsable del lugar.

"Lo que estamos realizando es una recuperación de las razas más primitivas y más similares a las que antaño hubo", agrega. Acariciando con el hocico el suave pelo marrón de su madre, un potro se amamanta antes de desaparecer entre los árboles con la manada.

"Estos animales los hemos soltado para que funcionen ellos solos, para que se manejen en el medio", dice el conservacionista Diego Benito.

"No les damos alimentos. Simplemente los vigilamos y hacemos un poco el siguimiento dentro de los grupos, cuáles son los caballos dominantes, las yeguas que puedan estar embarazadas", agrega. En total solo existen unos 150 Retuerta, identificados mediante estudios genéticos como una de las razas de caballo más antigua de Europa.

Estos fueron traídos desde el parque español de Doñana, en el sur, único lugar donde existían previamente, para crear una segunda área de reproducción en Campanarios, donde ahora hay unos 50.

Los caballos que a finales del siglo XV llegaron de la mano de los conquistadores españoles a América, donde se cree que se habían extinguido hacía tiempo por la acción del hombre, pastaban en libertad en la España prehistórica, cuyos pobladores los inmortalizaron en pinturas rupestres como las de las célebres cuevas de Altamira.

En los últimos años, "España ha mostrado un retorno muy interesante de la vida salvaje", con recuperación en el número de lobos, buitres y el amenazado lince ibérico, afirma Frans Schepers, director de Rewilding Europe.