Siguen los muertos en tierra de Bolívar

Una nueva jornada de marchas opositoras y contramarchas oficialistas derivó en más disturbios y registró al menos tres víctimas fatales, con lo que el número sube a 34 los fallecidos en las protestas. Aunque las manifestaciones más multitudinarias fueron las de Caracas, las víctimas mortales se produjeron en San Cristóbal (Táchira), Valencia (Carabobo) y Mérida, en el estado del mismo nombre. La última víctima reportada es Jesús Labrador, de 40 años, muerto en la ciudad andina de Mérida en un tiroteo entre manifestantes de oposición y motoristas encapuchados en el que también hubo otros cuatro heridos. Tambien se conocieron las otras dos víctimas: Argenis Hernández, manifestante opositor de 26 años que murió por el disparo de un motociclista que no pudo pasar por una barricada en Valencia, y Wilfredo Rey, de 31 años, también por disparos en San Cristóbal, aunque testigos aseguraron que no participaba en la protesta sino que atendía a un herido. Además, en Caracas fue detenida la periodista Mildred Manrique en un allanamiento de la Guardia Nacional en un edificio de la plaza Altamira, bastión opositor de la plaza Altamira, porque desde su apartamento supuestamente se lanzaron objetos. Compañeros de Manrique en el diario 2001 aseguraron que buscan acusarla de terrorismo por poseer chalecos antibalas y máscaras antigás, además de material contrario al gobierno en su computadora. Exceso policivo La fiscal general de Venezuela, Luisa Ortega, admitió ayer que ha habido "excesos policiales" durante las protestas que se desarrollan en el país desde hace más de un mes contra el gobierno de Nicolás Maduro. En el tema de la violación a los derechos humanos, sí ha habido excesos policiales, pero desde el Ministerio Público los estamos investigando, al día de hoy nosotros tenemos 60 investigaciones por presunta violación a los derechos humanos, dijo Ortega. La fiscal, sin embargo, también aseguró que desde la oposición ha habido un ataque desmedido a la Guardia Nacional Bolivariana. Venezuela vive una oleada de protestas que, según Ortega, ha dejado un saldo oficial de 34 muertos, más de 450 heridos y casi 2,000 detenidos, 121 de ellos aún en prisión. Ortega señaló que las autoridades mantienen detenidos a 15 funcionarios acusados de cometer abusos, pero recalcó que se trata de conductas aisladas que no responden a instrucción alguna de superiores.