El Rabel, la Mejorana y el Socavón

Rabel, Mejorana y Socavón, instrumentos de cuerda auténticamente panameños, hecho por el hombre de la campiña interiorana, para ejecutar los más significativos sones que salen de lo más sublime de cada ejecutante. El Rabel, instrumento de tres cuerdas parecido al violín, en vías de desaparecer, solo lo podemos encontrar en los campos de Cañazas de Veraguas, algunos lugares de Coclé y posiblemente en la región de Ocú, es un instrumento folclórico, al igual que los instrumentos anteriores, como señalé anteriormente tiene mucha similitud con el violín, con la misma caja de resonancia, casi que con las mismas medidas.

El Rabel, conocido popularmente como ‘rabo de Micho', tiene un intérprete llamado Gil Urriola de la comunidad de Alto Guarumo de Cañazas es el músico rabelista que más se le conoce en esta región, el mismo construye su instrumento, que por lo general es de cedro amargo; señala Gil que, por esas comunidades existen más de veinte rabelistas, tanto veteranos como jóvenes, que han aprendido en ratos de ocio, como medio de recreación.

Por los años de 1960-1970, existió un grupo folclórico muy popular integrado por, Francisco Javier de Atalaya, ejecutaba el rabel, Pastorcito Mojica en la mejorana y Rogelio Mojica en la caja, ambos de La Colorada de Veraguas, acompañaban a los bailadores del Centeno y Las Tranquillas, en los Festivales de La Mejorana de Guararé. Pastorcito tenía un modo o forma de afinar la mejorana un tanto diferente a las demás, su afinación era por 6 y el ritmo era conocido como ‘mejorana suestea', posiblemente estos afinamientos han pasado al olvido. Eusebio ‘Chevo' Moreno, de Los Asientos de Ocú, llego a ejecutar el rabel, y se hizo muy popular en estas regiones, en actividades festivas, juntas, cumpleaños y bailes populares que organizaban los campesinos.

El Socavón, instrumento de cuatro cuerdas, se dice que es el macho de la mejorana, según algunos mejoraneros es un tanto difícil de ejecutar, por esa razón casi que ha estado en vías de extinción, en su época fue muy famoso Felicito Barba, de la región de Llano Grande de Ocú, hoy día siguen ese camino, Edwin Martínez y Rubén Almanza en la ejecución de este complejo instrumento.

La Mejorana: Instrumento de cinco cuerdas, que siempre ha estado en los primeros lugares, como instrumento melódico, tanto para acompañar a los cantadores como para bailadores, cuya representatividad lo llevan los auténticos manitos ocueños. Ocú y Guararé, son los pueblos que más le hace honor al instrumento, uno celebra el Festival del Manito y el otro el Festival de la Mejorana. Estos instrumentos reafirman nuestra identidad.