El primero en el velorio

Artista panameño Rubén Blades viajó al funeral de su amigo ‘Cheo’
  • domingo 20 de abril de 2014 - 12:00 AM

Notablemente quebrantado y sollozo, el cantautor panameño Rubén Blades fue una de las primeras celebridades de la música latina en llegar al funeral de su amigo ‘Cheo’ Feliciano.

Al igual que decenas de personas, el cantante panameño llegó a San Juan a despedirse, ayer sábado, del salsero puertorriqueño en un acto fúnebre, aproximado más a una fiesta de pueblo, donde se recordaron sus grandes éxitos y se narraron anécdotas de él como ser humano.

Blades arribó a Puerto Rico la noche del viernes, y se encontró con la familia de Feliciano, trasladándose a tempranas horas de ayer, al coliseo ‘Roberto Clemente’ de la capital, a darle el último adiós a quien fuera compañero suyo en ‘Las Estrellas de la Fania’.

El artista panameño se mantuvo un tiempo con la familia de Feliciano, que incluyó su viuda, Cocó, en una simulada capilla que prepararon en el centro deportivo capitalino.

Digno homenaje

Un salón del área sur del Coliseo, lugar por donde regularmente entran los artistas a sus espectáculos, fue convertido en una capilla, en la que los familiares e invitados especiales tuvieron unas horas para un velatorio privado.

Tan pronto se encontraron, Blades y Prieto León, se fundieron en un abrazo.

A su llegada al Coliseo, Blades compartió que para todo el pueblo panameño la noticia del fallecimiento del cantante boricua ha sido un tremendo golpe.

"En Panamá, en general, a nosotros no cayó como una piedra. La gente quedó muy impactada’. Y él quedó más sorprendido porque cuando recibió la llamada de que ‘Cheo’ había muerto, estaba durmiendo.

‘Le dije a Charlie’: -no puede ser-, si yo hablé con él hace poco y lo sentí muy fuerte hablando. Me dice, ’no, murió en un accidente de tránsito’ y le digo... ¿qué?’, relató el cantante de Pedro Navaja.

"Después de haberse repuesto de cáncer. Se empezó a recuperar y todos nos alegramos de eso", añadió conmovido.

Blades partió de regreso a Panamá, ayer, en horas de la tarde, pues lo espera su esposa, quien cuida del padre enfermo del artista.