Modelo panameña cosecha triunfos en Nueva York

Quien tiene que dejar su tierra para buscar mejores oportunidades lo hace con el corazón roto, pero para Cleirys Velásquez, la supermodelo panameña que triunfa en Nueva York, el sacrificio ha traído recompensas.

Esta chica de 27 años, y oriunda del barrio de San Francisco, contó a El Siglo, que ha trabajado en campañas de reconocidas marcas como Adidas, Estee Lauder, L'Oréal, Maybelline, Fenty Beauty (de la cantante Rihanna), Karl Lagerfeld y Óscar De La Renta.

Su meta la conquistó a los 22 años, cuando se atrevió a probar del sueño americano. Recordó que su deseo fue apoyado por su madre, quien puso a su disposición su tarjeta de crédito para financiar los primeros días en EE.UU. A solo una semana de instalarse en la Gran Manzana, consiguió empleo como modelo, trabajo que viene haciendo desde entonces.

Perfecta para Victoria's Secret

Como ya les habíamos contado, Cleirys es la primera modelo panameña en trabajar con Victoria's Secret y lo viene haciendo desde hace seis meses, calculó la istmeña. ‘Pienso que fue la oportunidad perfecta en un momento oportuno', destacó.

Justamente le tocó trabajar con la marca de lencería cuando la filosofía de la empresa es la aceptación de la diversidad de cuerpos. De hecho, Cleirys reveló que la contrataron sabiendo que tenía una marca en su cuerpo que para muchos sería catalogada como imperfecta. ‘Yo tengo una cicatriz de una quemada en mi glúteo izquierdo y yo le dije a mi booker y me respondió que no había problema con eso. Ellos aman la imperfección y la idea es mostrar a una mujer real', aseguró.

Sobre el fin de los desfiles de la marca y con ello la desaparición de sus angelitos, ella nos sopló: ‘Hay murmullos por ahí en la organización de que quieren traerlo de vuelta... A mí me encantaría ponerme unas alas de esas. Yo no me quejaría. A donde ellos quieren que yo vaya por siete días, ahí voy a estar grabándolo y disfrutándolo todo', dijo entre risas.

En su recorrido ha trabajado con modelos como Adriana Lima, Irina Shayk, Gigi Hadid y Alessandra Ambrosio, mujeres a las que definió como personas buenas, súper tratables y con los pies en la tierra.

Trabajo y aspiraciones

El modelaje es como una labor cualquiera, se trabaja en días de semana de 8:00 a.m. a 5:00 p.m. Hay días en que a Cleirys le toca correr por todo Manhattan, luciendo algún atuendo para lograr una foto espectacular. Es por ello que consideró que a veces le toca realizar trabajos pesados, de los cuales saca experiencias únicas, por eso no se piensa retirarse de un trabajo que no jubila a nadie.

‘Hace poco trabajé con una señora de 65 años, quien me contó que firmó un contrato de siete cifras con L'Oréal París', relató agregando que está trabajando para iniciar su primer emprendimiento enfocado en su rubro.

Esta muchacha, quien cuando llega a Panamá le encanta comer ciruelas, sopa de carne y las hojaldre, nos adelantó que prontito, también firmará su primer contrato de cifras millonarias. ‘No me quiero ilusionar, hay marcas que me han puesto el ojo, pero prefiero no preguntar, porque pienso que si pregunto lo salo. Yo le digo a mi agente, cuando tengan todo listo, ustedes me llaman, voy y firmo. Hay cosas que están sucediendo y Dios, primero, van a pasar', decretó.

Luchó por sus derechos

Su carrera no ha estado marcada por caminos de rosas. En Nueva York se enfrentó a obstáculos que superó con la frente en alto.

Una agencia para la que trabajaba se disculpó con ella, tras presionarla a adelgazar más allá de lo saludable.

Ella estaba en talla 0 y le pedían que bajara a doble 0, además la sometían a pesarse constantemente, lo que cayó en acoso y la impulsó a presentar una demanda en contra de su anterior agencia, con la ayuda de su nueva empresa representante. ‘A mi me ayuda mi nueva agencia y me dijeron, si quieres levantar la voz te ayudamos. Ellos estaban conscientes de las consecuencias que surgirían si iba bien o mal', comentó.

Lo que ha vivido la ha convertido en una persona más fuerte, todoterreno. Recordó que a sus inicios el rechazo fue tan fuerte que su madre la apoyaba a no desistir. ‘En un trabajo tu no recibes tantos ‘no' como los que recibes en el mundo de la moda. Tu puedes ir a 10 casting diarios y todos son ‘no'. Hacerlo todos los días, por meses, pesa muchísimo', reconoció.

Su compromiso, trabajo y dedicación siguen dando frutos. Ella es una panameña que se ha dado a respetar.