Los duques de Sussex abandonan palacio con la bendición de la Reina
- lunes 20 de enero de 2020 - 2:17 PM
Tras estallar la tormenta "Megxit" y celebrase la cumbre de Sandringham, los duques de Sussex no tendrán estatus de Alteza Real y comenzarán su nueva vida apartados de las obligaciones institucionales, sin los privilegios que tenía, pero con la bendición de la Reina Isabel II.
Tras llegar a un acuerdo en el que el príncipe Enrique, el nieto de la reina Isabel II, dejará de trabajar para la Familia Real esta primavera, ha admitido que hubiera querido seguir prestando servicio a su abuela sin fondos públicos, pero que "no ha sido posible".
La nueva vida de los duques de Sussex, Enrique y Meghan, supone un recorte en los privilegios que tenían hasta ahora. Su deseo de vivir de forma independiente en Canadá les ha obligado a perder el título de "Sus Altezas Reales".
Su deseo de formar parte de la familia real se ha visto truncado, al igual que sus privilegios. Así Enrique y Meghan no pueden representar a la Reina. "Entienden que están obligados a retirarse de los deberes reales”, según lo acordado.
A pesar su gran formación militar y su paso por el ejercito, a Enrique se le retiran los nombramientos militares oficiales. Los duques de Sussex podrán seguir siendo patronos reales de sus actuales organizaciones.
Como parte del pacto, la pareja renunciará a recibir fondos públicos -no así a la paga procedente a nivel privado del Ducado de Cornualles, que dirige el Príncipe Carlos de Inglaterra.
Podrán vivir en su casa de Forgmor Cottage, pero tendrán que devolver al erario público los 2,6 millones de euros que costó la reforma.