Cumplirán con clientas en nombre de Caridad

El reconocido plan 'todo incluido' de Caridad Hurtado, llamada popularmente como Caridad Kanelon, responderá a sus clientas, cumpliendo con los viajes y operaciones agendados.

Así lo dieron a conocer los nuevos encargados del negocio, en medio de la detención preventiva de Caridad, quien, por evidentes razones, no puede atender a sus 'mujeres bellas'.

Por si no lo sabían, Caridad se ha hecho popular en redes sociales gracias a sus paquetes de intervenciones estéticas, que se pagan como si fueran un susú. Es decir, un pago a cuotas. Por eso su mote de 'Reina de los todos incluidos'.

"Confirmamos nuestro compromiso y le damos la tranquilidad en la continuidad de los contratos y abonos realizados, en las fechas acordadas con ustedes, para realizarse la cirugía en Bogotá, Colombia", explicaron.

Recordarán que Caridad, es propietaria de diversos negocios como salas de belleza Mujeres Bellas, Spa Mujeres Bellas, Cevichería Kanelon, Natha Barber Shop y prendas Caridad Kanelon.

Sin embargo, las autoridades consideraron que sus ahorros bancarios no coinciden con las ganancias que dejan sus emprendimientos. Es por eso que un juez de garantías le imputó cargos por su supuesta vinculación con el delito de blanqueo de capitales.

Cualquiera no entra

Una joven que pidió la reserva de su identidad y a quien llamaremos Amanda, aseguró haberse sometido a un paquete completo de cirugía que incluyó aumento de bustos, glúteos y caderas. Además de reducción de cintura, brazos y piernas.

"Cada procedimiento tiene un costo. Eso lo sumas y te da el total, incluye honorarios del doctor, el viaje y la casa de recuperación, donde todas las pacientes son cuidadas en postoperatorio", detalló.

"De cantidad de dinero no te puedo decir, porque varía, pero un plan como el mío, puede alcanzar la misma cifra que la letra de una casa", sentenció.

Las clientas pagan una cuota quincenal. Pero, indicó que, en su oportunidad, le tocó operación antes de cancelar la totalidad del costo de su contrato, por eso, al regresar, continuó pagando sus cuotas hasta quedar en paz y salvo.

"Es algo complicado estar reuniendo dinero ajeno constantemente. Creo que los encargados están queriendo ser responsables y tener palabra, así como ella nos lo pedía a las que ya nos operamos", opinó.

Y concluyó: "Había que tener palabra