Lenta recuperación
- martes 20 de noviembre de 2012 - 12:00 AM
La Cámara de Comercio de Colón, ha levantado un informe de unos 20 comercios afectados por las protestas que se dieron el pasado mes de octubre y que cuyos daños ascienden a más de un millón de dólares, enfatizando que solamente se han tomado en cuenta aquellos que interpusieron las denuncias, entre los que hay desde pequeños negocios, hasta grandes empresas.
Contrario a lo que dice el Ministerio de Economía y Finanzas, la Cámara de Comercio ve esta recuperación lenta y que se podría extender hasta los tres primeros meses del próximo año, por lo que se ha presentado en la mesa del diálogo un reclamo en donde estos negocios sean indemnizados.
La Sociedad China de Panamá y la Embajada de China se acercó a la Cámara de Comercio Colón para pedirle el apoyo en una demanda contra el Estado panameño por unos seis comercios de asiáticos que fueron bandalizados, ya que el Estado era responsable de la seguridad.
El Municipio de Colón, está realizando un análisis de los comercios afectados, para evaluar su situación y los arreglos en cuanto al pago de los impuestos municipales.
Los últimos hechos que se han dado en Colón, no han sido obstáculo para que las expectativas de inversiones económicas, sigan en aumento, tanto en el área pública, como en el sector privado indicó Adolfo Lou Córdoba, jefe de la Dirección de Planificación y Política Económica en Colón.
Córdoba señala que las inversiones no se han visto dañadas en cuanto a su imagen, ya que según el sector Gubernamental habrá un fin de año con muchos adelantos en la provincia, mientras se mantiene la expectativa de que al culminar el diálogo que se da en estos momentos, las inversiones aumenten y se avanzará ya que Colón ha sido bastante olvidada por gobiernos anteriores y se espera que reciba lo que merece con un repunte en sus infraestructuras y su economía, indica el funcionario.
Un total de nueve días duraron las protestas que dejaron tres muertos por la aprobación de la posteriormente derogada Ley que permitía la venta de tierras en la Zona Libre de Colón.