¡E‘Mo’cionado!

Alas 7:00 de la noche de ayer el estadio Kenny Serracín vibró de la emoción. Desde el jardín izquierdo se escuchaba el rock pesado de ‘Enter Sandman’ (canción de Metallica) y entraba el máximo cerrador de las Grandes Ligas, Mariano Rivera.

Fue una noche especial para el ídolo de los Yanquis de Nueva. La fanaticada, la mayoría chiricana, se rindió a sus pies para agradecerle por las 19 temporadas en que dejó la Bandera de Panamá en alto.

A pesar de que ha recibido muchos reconocimientos en Estados Unidos, el de anoche en la inauguración del béisbol mayor, le llegó al corazón.

‘Este es totalmente diferente, esta es mi gente, mi pueblo, el lugar que me vio crecer. Panamá es mi Patria, como lo dice Rubén Blades en su canción, no hay más grande que eso’, dijo Rivera en el coloso chiricano.

Wigberto Quintero, presidente de la Federación Panameña de Béisbol, le entregó una placa por su trayectoria; mientras que Pandeportes le colocó la Orden Manuel Roy, al mérito deportivo y le obsequió una estatuilla creada por el artista Joaquín Carrasquilla. El popular ‘Mo’ también se llevó a casa una foto de su época de pelotero con la novena de Panamá Oeste.

Al terminar la ceremonia, Rivera saludó a ambos equipos y se subió en un four wheel para dar la vuelta entera al estadio. A su paso se encendían los flashes de las cámaras y todos querían un recuerdo de ese momento.

‘Gracias por ese tremendo apoyo, para mí fueron momentos difíciles, pero ustedes los hicieron más fáciles. El año pasado vi muchas banderas panameñas en los estadios’, les dijo a los fanáticos.

Al final, Rivera, quien estuvo con su esposa en la gradas, acompañó al cantante chiricano Lenín Ríos para entonar el Himno Nacional desde la lomita.