- lunes 01 de julio de 2024 - 5:15 PM
De las lágrimas por fallar un penalti en la prórroga, a las risas después de ganar a Eslovenia en la tanda de penaltis, Cristiano Ronaldo tendrá una vida extra más en la Eurocopa gracias a la gran actuación de su portero Diogo Costa, que reinó en la tragicomedia de su compañero después de parar tres penas máximas en la tanda de penaltis y de salvar un mano a mano ante Sesko en el último instante de la prórroga.
Cristiano se vio eliminado de la Eurocopa durante muchos minutos. Oblak, un muro impenetrable, otro portero excelso que merece un monumento, frenó todos sus intentos. El más intenso, en la primera parte de la prórroga, provocó el llanto del inagotable futbolista portugués, que no contuvo sus emociones después de fallar un penalti que habría evitado la lotería posterior desde los once metros. Pero ahí apareció Diogo Costa, para rescatar a su compañero, que después se atrevió de nuevo con una pena máxima que, esta vez, no falló.
Su madre también lloró
Pero el drama para Cristiano Ronaldo se vivió al descanso de la prórroga. Se mascaba la tragedia para Portugal. Su madre, en el palco, también lloraba desconsoladamente. Sus compañeros besaban y abrazaban a un ídolo que parecía caído y que estuvo a un paso de ni siquiera alargar el partido hasta los penaltis.
Diogo Costa dio otra bola de partido a Cristiano con una parada decisiva en un mano a mano ante Sesko, el segundo que falló en un choque que se resolvió en los penaltis. En ellos, otra vez, el portero de Portugal apareció para detener los lanzamientos de Drkusic, Balkovec y Verbic. Entonces, Cristiano, respiró aliviado, calmó su ansiedad y Francia espera en cuartos de final.