Maestro del ring
Crawford, que ya ha sido campeón mundial del peso welter junior, y de la división peso welter
- lunes 16 de diciembre de 2019 - 12:00 AM
El campeón mundial del peso welter el estadounidense Terence Crawford, derribó tres veces a su retador el lituano Egidijus Kavaliauskas, y, el pasado sábado, retuvo su corona avalada por la Organización Mundial de Boxeo (OMB).
Crawford se anotó tres derribos en una victoria por nocáut técnico en el noveno asalto sobre Kavaliauskas, y retuvo su título de las 147 libras por tercera vez, ante la presencia de 10.101 espectadores que acudieron al Madison Square Garden de Nueva York, Estados Unidos.
El aún campeón logró derribar a su oponente en el séptimo asalto y dos más en el noveno, pero igualmente recibió mucho castigo de parte del lituano.
Crawford, que ya ha sido campeón mundial del peso welter junior, y de la división peso welter, no ha podido disputar un combate de primer nivel, con un rival de alta calidad.
El estadounidense, que comienza sus peleas en posición de diestro y luego cambia a zurdo, boxeó de zurdo desde que sonó la campana del primer asalto.
En el tercero, Kavaliauskas conectó una mano derecha que provocó que Crawford tuviera que sostenerse en él y, cuando el púgil lituano volvió colocar varios golpes más, Crawford se arrodilló, pero el árbitro Ricky González dictaminó que fue un error.
Kavaliauskas conectó varias derechas más en el cuarto asalto que provocaron una hinchazón en el ojo derecho de su adversario.
De nuevo, el púgil lituano conectó una excelente combinación de derecha e izquierda que dejó a Crawford noqueado al comienzo del séptimo asalto.
Sin embargo, el estadounidense encontró el momento oportuno para castigar con una sólida mano derecha por detrás de la oreja de boxeador lituano, quien sufrió la dureza del golpe y cayó de rodillas.
En el octavo, Crawford controló las acciones sobre el cuadrilátero y casi al término del asalto volvió a meter dos poderosas derechas, que dejaron a Kavaliauskas casi fuera de acción.
El estadounidense acabó el trabajo en el noveno asalto, cuando al principio derribó a Kavaliauskas con una combinación y luego un uppercut derecho y una mano derecha en la cabeza que lo mandó a la lona.
