Aunque el rostro no es el único lugar donde aparecen los barros en la cara pueden convertirse fácilmente en nuestra peor pesadilla.

Los barros son las lesiones típicas del acné que aparecen tanto en cara como en espalda, hombros y en el pecho, eventualmente en algunas otras partes del cuerpo, como el cuello.

La grasa producida en exceso por las glándulas sebáceas, obstruye los poros haciendo que la bacteria Propionibacterium acnes se haga presente, ya que es un organismo anaeróbico (que no sobrevive en el aire), por lo que encuentra un ambiente ideal para desarrollarse en los poros tapados.

CARACTERÍSTICAS

Según la dermatóloga Keyse Lirios, una de las características principales de los barros en la cara y en las otras partes del cuerpo, es la inflamación y el pus que contienen, lo que les da el tono amarillento que presentan después de que empezaron como una protuberancia dura al tacto y de color rojizo, llamados también comedones, pústulas, pimples y confundidas a veces con las espinillas.

Para la prevención del acné la especialista nos dejó algunos pasos que debemos seguir:

* Lavar convenientemente la cara con un jabón específico para piel grasa o de tipo neutro. Esta rutina se realiza tanto por la mañana como por la noche.

* Desmaquillarse siempre antes de acostarse.

* Evitar manipular los granos, pues solo se conseguirá extender la infección y agravar el problema.

* Lavarse la cara después de hacer ejercicio para así evitar la acumulación de toxinas y sudor en la piel.

* Cambiar con frecuencia toallas y fundas de almohada pues éstas están en contacto con el rostro.

* Retirar el pelo de la cara con el fin de que este no se introduzca en los poros y de lugar a infecciones y granos.

TRATAMIENTO ADECUADO

Es muy común que si se tiene barros en la cara, lo primero que hacemos es buscar cremas, geles, pomadas, lociones y jabones especiales para tratar el problema y que están disponibles a la venta sin receta médica.

Esto es muy válido y comprensible, sin embargo la especialista nos explicó que se debe tener mucho cuidado en la selección de estos productos; ya que existe una enorme variedad y esto dificulta la correcta decisión a la hora de adquirirlos.

Por otro lado, tenemos la inclinación a preferir aplicarnos productos naturales como hierbas, frutas, vegetales, barro, miel, etc. en forma de mascarillas y faciales en casa.

Existe ahora una línea de productos que reúne lo mejor de ambas opciones, es decir, productos químicos científicamente probados y elementos naturales.