Los elementos para encender la pasión

Es evidente que la mayor parte de los hombres desea ser complacidos sexualmente. Es la atracción sexual el punto de partida de la seducción.

Para ello es fundamental que las mujeres nos centremos inicialmente en este punto.

Debemos tratar de resaltar las partes de nuestro físico que los hombres más desean. Un buen maquillaje y un buen vestido mejorarán nuestra apariencia y nos ayudarán a captar la atención del hombre deseado.

Es importante en este punto el término resaltar y no enseñar. En el juego de la seducción, como veremos más adelante, es fundamental el estar cerca de complacer al hombre sin llegar a hacerlo completamente.

Al tratarse del vestuario es importante centrarse en insinuar y nunca en llegar a enseñar. Debes dejar mucho margen a la imaginación masculina y a su deseo de poder llegar a tenerlo todo.

Una vez que hemos conseguido su atención es cuando nuestra psicología entra en acción.

El juego de la seducción consiste en dar para luego quitar. En los primeros momentos es importante que el hombre crea que tú también te has fijado en él.

Por ello es importante intercambiar unas miradas iniciales mostrando interés, para luego mostrarte fría y distante.

Este ir y venir es la clave para que crees en la psiquis masculina cierto desconcierto y llames todavía más su atención.

En estas fases iniciales, una caricia o un susurro marcarán tu interés por él y despertarán todavía más su deseo.