Si no has oído sobre esto, aquí te explicamos más sobre el sexo con el puño o fisting .

Este consiste en la introducción parcial o total de la mano en el ano o la vagina de la pareja, esta conducta es poco conocida, pero practicada.

Antes de iniciarlo debes tener cuidado porque si no se toman ciertas precauciones puede provocar serias lesiones como desgarres o hemorragias.

Deben tomarse una serie de precauciones:

- Higiene y limpieza: Quien tiene el rol activo, el que penetra, debe tener cuidado con la higiene. Hay que lavar bien la mano que vaya a introducirse para evitar cualquier tipo de infección.

- Abundante lubricante: es primordial la utilización de lubricante en abundancia, tanto en la zona como en la mano. Si es lubricante a base de agua, mucho mejor. Evitar los que son de aceite.

- Relájate: Al entrar, tu amante debería relajar los músculos de su vulva tanto como pueda. Una forma de hacer esto es apretar y mantener tensos los músculos de la vagina, después libere esa tensión con una exhalación rápida. Al liberarse y relajarse ella, su mano se deslizará más adentro.

- Poco a poco: La receptora debe respirar profundamente, mientras se imagina su vagina abriéndose para recibir la mano de su amante. Si ella está acostada de espaldas, puede encontrar que estirándose e inclinando la cabeza hacia atrás crea más espacio. Con la espina dorsal estirada, todos los órganos internos se mueven hacia arriba, creando más espacio y menos presión en la vagina.

- Un poco más: Al entrar los dedos, el pulgar a menudo se dobla debajo de ellos para formar un puño, aunque también es posible que el pulgar esté afuera. La receptora puede comenzar a contraerse tanto que la presión sobre su mano sea incómoda. Quédate ahí. No salgas de repente porque podrías lastimarla.