Muchos hombres están interesados en mejorar su propio placer y satisfacción, así como los de su pareja, durante el sexo.

Enfocarse en el desempeño sexual puede causar ansiedad, no obstante, algunos cambios de estilo de vida simples pueden ayudar, entre ellos reducir la ansiedad, mejorar la disfunción eréctil, mejorar la relación con la pareja y aumentar la resistencia física mediante la práctica de rutinas de ejercicio o algún deporte.

Estos cambios pueden hacer que el sexo sea más placentero y satisfactorio para los involucrados. Es importante notar que preocuparse por conseguir y mantener erecciones es con frecuencia un factor clave en la ansiedad por el rendimiento.

Algunos hombres creen que la penetración es lo más importante e incluso lo que define el sexo. Sin embargo, muchos que han experimentado disfunción eréctil pueden sentirse motivados a aprender que no necesitan una erección para complacer a su pareja.

De hecho, la disfunción eréctil puede ser un incentivo para intentar nuevas estrategias que funcionen mejor para su pareja.

El preámbulo sexual puede incluir caricias, besos y sexo oral. Hacer que el preámbulo sexual dure puede mejorar la experiencia sexual.

Los hombres que quieren durar más durante la relación sexual pueden tratar la técnica de empezar y parar. Para utilizar esta técnica, debe detenerse la actividad sexual cada vez que la eyaculación es inminente. Respira profundamente y empieza lentamente de nuevo, luego detente para retrasar la eyaculación tanto como lo desees.

Si una persona ha estado con una pareja por mucho tiempo, el sexo puede empezar a sentirse rutinario, y puede parecer difícil sentirse excitado, mantenerse enfocado o satisfacer a la pareja. Puede ser útil intentar una nueva actividad sexual o posición, o bien tener sexo en otro lugar. También, hablar acerca de fantasías sexuales puede hacer que el sexo sea más excitante.

Si los problemas relacionados con el sexo han creado tensión o preocupación, es mejor hablarlos con la pareja. Trabajar juntos en una solución puede ayudar al hombre a sentirse menos aislado y redirigir la preocupación o la culpa. La pareja puede disminuir el temor a la disfunción sexual y puede tener sugerencias prácticas.