Cómo prevenir los gatillazos

PREVENCIÓN

El término coloquial gatillazo sirve para definir la desaparición repentina de la erección durante el acto sexual, muy a pesar de que los niveles de excitación sean adecuados y que se esté disfrutando del acto.

En primer lugar, es bueno tener claro que el gatillazo es algo que muchos hombres experimentan al menos una vez en su vida, y que mientras sea esporádico no hay motivo para preocuparse. Pero si se presenta con frecuencia resulta importante tomar cartas en el asunto.

Para comenzar a controlar los nervios, pues estos son los principales responsables de la desaparición repentina de la erección. Si quieres disfrutar realmente el acto sexual mantente relajado.

Si estás muy ansioso porque se acerca el momento de tener relaciones sexuales, evita algunas actividades que pueden facilitar el gatillazo:

Masturbarte antes del acto: recuerda que después de eyacular viene el período refractario y que puedes tardar varios minutos en recuperarte.

Consumir alcohol o drogas: y es que si buscas estas alternativas para relajarte, el resultado final puede ser que no consigas la erección.

Elegir un espacio inapropiado para el sexo: el sexo en lugares públicos puede ser divertido, pero también estresante. Si tu atención no está centrada en el acto, sino en que alguien podría descubrirlos, es muy posible que sufras de un gatillazo por los nervios.

Si a pesar de seguir todas estas recomendaciones, los gatillazos continúan, resulta importante visitar a un médico para analizar el caso y descubrir qué está afectando tus erecciones.