Cómo confiar sabiendo que miente

En el momento que se detecta una mentira es muy importante hablar con sinceridad por ambas partes, aunque es muy difícil confiar en la sinceridad de alguien que fue deshonesto, hay que dialogar lo sucedido y colocar reglas de ahora en adelante.

La comunicación es la base de todo y para poder confiar en tu pareja de nuevo, es muy importante decir qué te molesta y qué no quieres se repita nuevamente; ten en cuenta que si por tu parte eres sincero, es muy probable que la otra persona lo sea, más si cometió un error.

De igual modo, es muy recomendable analizar la situación y ver si hay o no futuro o si por tu parte, tienes la capacidad de perdonar dicho error. Si quieres volver a intentarlo, será un trabajo de ambos y si ves que no está resultando nada, puedes optar por buscar ayuda profesional con algún terapeuta de parejas.

No mientas a tu pareja porque te mintió primero

Ese dicho de ‘ojo por ojo y diente por diente' no es la solución a un problema de pareja y menos si es por alguna mentira o infidelidad. Mentir porque tu pareja mintió solo creará un círculo vicioso de mentiras que volverá tu relación tóxica y difícil de llevar, pues la sinceridad habrá desaparecido por completo.

Por más que quieras que esa persona se sienta igual que tú, las mentiras solo herirán y crearán situaciones que en muchas ocasiones pueden ser irreparables. La mejor opción es ser tú quien dé el ejemplo de lealtad y honestidad, esto te hará sentir mucho mejor contigo y le demostrará a tu pareja lo mucho que valoras la relación y su compañía.

Sabemos que es difícil no guardarlos después de una traición o después de descubrir mentiras, sin embargo es algo que te dañará tanto a ti como a tu pareja y creará un ambiente tenso y, si lo que buscas es reparar el daño, guardar rencor o estar resentido es contraproducente. Los resentimientos solo harán que recuerdes una y otra vez el error y para solucionar un problema de este tipo, se debe pensar con cariño y no con dolor.

Igualmente es sumamente dañino juzgar al otro por dicho error y culpar de cada problema que salga a relucir. Las relaciones son de dos y aunque uno haya errado, la otra parte debe encargarse de cooperar para remendar el fallo y no aprovecharse de ahí para juzgar o criticar cada traspié que cometa tu pareja. La clave está en ser comprensivos, tener paciencia y en buscar la manera de confiar nuevamente.