Existen muchas maneras de besar como personas en el mundo y aunque las formas de hacerlo sean parecidas, existen ocho tipos de besos que harán que tu pareja caiga rendida a tus pies.

Los besos que más les excitan a los hombres y a las mujeres son los explícitos, es decir, en los que hay un intercambio de saliva y en la que ambos tienen la boca abierta para poder jugar con las lenguas.

Conocido popularmente como “el beso estrella” de los hombres, este gesto de amor suele aumentar los niveles de excitación en la mujer.

Enciende la mecha sexual con los “besos inesperados”, especialmente en las zonas calientes de tu pareja. Esos son infalibles cuando tu objetivo es aumentar el deseo y el placer sexual.

Un buen beso húmedo, con caricias, con la cabeza inclinada un poco hacia atrás, mientras que el otro la sujeta con sus manos, es otro de los besos que excitan a los hombres y a las mujeres.

Un buen beso húmedo, con caricias, con la cabeza inclinada un poco hacia atrás, mientras que el otro la sujeta con sus manos, es otro de los besos que excitan a los hombres. Estos son conocidos como los “besos clásicos” los cuales desempeñan un papel crucial en la salud emocional. En momentos de estrés, ansiedad o tristeza, un beso clásico puede actuar como un bálsamo emocional, calmando nuestros nervios y proporcionando consuelo.

“Besos sin besos” son aquellos que no se dan pero excitan muchísimo. Los labios únicamente se rozan para levantar la pasión y las ganas de besar apasionadamente.

Los “besos franceses”, cuya particularidad es lograr una excitación casi de inmediato, no debes dejar de implementar junto a tu pareja. Estos besos consisten en besarlo para calentar el ambiente. Para ello, no se debe tener prisa e introducir la lengua despacio, sensualmente y jugar con ella en su boca.

Si lo tuyo es la pasión, te recomendamos poner en práctica “los besos apasionados”. Estos besos son muy picantes, puesto que son besos impulsivos, fuertes y candentes. Estos se dan directamente en los labios, se juega con las lenguas mientras se dan pequeños mordisquitos en los labios y el cuello.

Los besos exploradores son los que no se centran únicamente en la boca del hombre o la mujer, sino que exploran cualquier parte de su cuerpo. De este modo empieza el juego previo, casi sin que se dé cuenta y poniéndolo a cien. Se empieza por besar las orejas, después el cuello y luego ir bajando por el torso, el ombligo y más abajo si de llegar a la intimidad sexual se trata.