Aprende a pensar como hombre
- martes 22 de septiembre de 2015 - 12:00 AM
A veces los hombres se comportan de forma distante, poco interesada o desconsiderada. Y las mujeres –en lugar de aceptar lo que allí se nos está comunicando– nos entregamos a la libre interpretación de conductas.
Los beneficios de la empatía
Pensar ocasionalmente como hombre nos facilitará despojarnos de todas esas explicaciones que como mujeres nos damos. Hay que empezar, ante todo, a servirnos de ese recurso maravilloso que es la empatía.
Empatizar con la otra parte te servirá al comienzo de una relación para evaluar si hay o no interés, pero también funciona cuando el vínculo está ya consolidado, como por ejemplo durante las discusiones.
Algunos ‘tips'
1- Concéntrate solo en decodificar su conducta. Puede que encuentres que estás buscando amor en el lugar equivocado.
2- Obsérvate desde sus ojos. ¿Qué ves? ¿A una persona pidiendo algo razonable o a alguien que solo está queriendo que las cosas se hagan a su modo?
3- Analízalo. ¿Puedes jurar que reincide en una conducta que te fastidia solo para molestarte o porque es un perfecto desconsiderado? ¿Qué no existen otros motivos?
4- Analízate. ¿Y si tener la casa en orden, por ejemplo, no fuera tan importante como nos enseñaron a nosotras? ¿Y si la armonía de una pareja fuera más importante, (como de hecho creo que lo es)?
De la queja a la actitud
Cuando abandonamos las quejas, empiezan a aparecer los recursos. Porque, en la medida en que trabajamos para encontrarle opciones a los lamentos, aprendemos a manejar los conflictos más efectivamente.