En el terreno sexual, los abrazos representan un elemento de deseo y confianza.

Los abrazos pueden transmitir muchísimo erotismo y permiten que la pareja cree un contacto sumamente íntimo. A través del abrazo conseguimos unirnos al cuerpo de la otra persona, con lo podemos sentir su temperatura corporal y su respiración.

A la mayoría de las mujeres les gusta el sexo más suave, con abrazos y besos, mientras que a algunos hombres les excita decir palabras soeces cuando hacen el amor, buscar nuevas posiciones sexuales, pues prefieren ser más espontáneos y salvajes.

Una de las posiciones sexuales que les gustará a los dos se denomina como un oasis de tranquilidad en pleno revolcón apasionado.

Colóquense de lado y cara a cara. Intenta mantenerlo dentro de ti todo el tiempo. Luego, déjalo consumir lentamente por la pasión mientras entrelazas las piernas y aseguras de que sus pechos no se despeguen. Déjate llevar lentamente hacia un clímax sencillamente increíble.

Como no hay mucho movimiento, la llegada del orgasmo se retrasa. Esta postura es perfecta para los abrazos eróticos y el contacto íntimo. Te sentirás más cerca de él porque lo podrás estar mirando fijamente todo el tiempo. Esta maniobra propicia la clase de éxtasis emocional que te hace reír, llorar y alcanzar el clímax al mismo tiempo.

Para aumentar la intensidad y evitar que él se venga abajo, adopta un ritmo pélvico suave, mírale a los ojos mientras inspiras profundamente y con naturalidad.

Además, para volverlo totalmente loco, deslízate por su pene hasta que esté a punto de salirse, haz una pausa, y luego vuelve a introducirlo de golpe.