- jueves 03 de julio de 2025 - 12:01 AM
Paysita tengo 50 años y hace seis años enviudé. Después de un matrimonio largo y feliz pensé que ya no volvería a enamorarme, pero conocí a un joven de 35 años, divertido y sensible, con quien me siento viva de nuevo. Al principio solo era una amistad que con el tiempo se volvió algo más profundo. Mis hijos no lo aceptan. Dicen que él está conmigo por interés. Estoy atrapada entre el amor de madre y esta nueva oportunidad de ser feliz.
El amor no tiene fecha de caducidad y que hayas encontrado a alguien que te haga vibrar de nuevo después de un duelo tan profundo, habla de tu capacidad de renacer. Los hijos a veces confunden amor con control. Probablemente, te ven vulnerable, temen que alguien quiera aprovecharse de ti, o simplemente no están listos para verte como una mujer viva y en plenitud. A muchos hijos les cuesta aceptar que su mamá tiene una vida más allá de ser “mamá”. Tu rol como madre no desaparece, pero tampoco debe anular tu derecho a ser feliz. Habla con ellos desde el amor, con firmeza y claridad. No se trata de pedirles permiso, sino de pedir respeto. Invítalos a conocer a tu chico, no para convencerlos, sino para que vean con sus propios ojos quién es él. Y si aun así no lo aceptan, recuerda esto: ser madre no significa sacrificar tu felicidad.
