Fue a vender un teléfono celular y halló la muerte

HISTORIA

Ricardo Antonio Berrío estaba parado en la puerta de su casa observando la calle. Eran cerca de las 9:20 la noche del miércoles en el sector 5 de Mano de Piedra, en San Miguelito.

De repente escuchó varias ráfagas de bala a 10 casas de la suya.

Ricardo se sobresaltó. Se asomó a la calle para ver qué había ocurrido. Vio un carro rojo huir a toda la velocidad.

No sabía lo que había pasado. ¿Habrían matado a alguien?

Al rato vio venir corriendo a un muchacho que conocía. Llegó jadeante, cansado y soltó aquella frase que cambiaría su vida en cuestión de segundos:

-¡Mataron a tu hijo!-

Hubo un breve silencio. Sintió palpitar más fuerte su corazón y salió corriendo. Halló a su hijo Alberto Enrique Guevara, de 23 años, tendido en la calle.

Su instinto de padre lo llevó a acercarse al cuerpo de su primogénito y levantarlo, pero los policías que se encontraban custodiando la escena no se lo permitieron.

‘Cuando llegué, él aún estaba vivo y a los otros dos se los habían llevado al hospital', contó Ricardo mientras hacía los trámites y papeleos en la morgue judicial en Ancón para retirar el cádaver.

Fue a vender celular

Ricardo narró a El Siglo que su hijo no era ningún delincuente ni pandillero.

‘Mi hijo iba a vender un teléfono celular porque quería comprarse otro mejor. El se acercó a dos amigos. Parece que uno de ellos tenía problemas. El le enseñó el celular y entraron a la vivienda. Cuando los muchachos estaban viendo el móvil, llegó un auto, se bajaron tres tipos con pistolas, entraron a la vivienda y comenzaron a disparar', dijo Ricardo.

Los heridos fueron identificados como Edgardo Tuñón, de 34 años, quien recibió seis tiros y Edwin Aguilar Hernández, quien sufrió dos balazos. Edwin se mantiene delicado en el Santo Tomás.

‘Mi hijo no tenía nada que ver con el problema que mantenía uno de los heridos con los hombres que llegaron disparando', aseguró Ricardo.

Describió a Alberto como un joven trabajador, quien no se había casado y por lo tanto, no tenía hijo.

‘No nos dejó ni la semilla'.

Justicia

Ricardo pide justicia, pero dice que eso se lo deja a las manos de Dios.

Solicitó a las autoridades policiales reforzar la seguridad, porque en las calles no se ven los guardias.

Los restos de Alberto recibieron cristiana sepultura en el cementerio de Utivé, en San Martín de Pacora.

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CIFRA

3

homicidios se reportaron la semana pasada en San Miguelito.