La mataron de 32 puñaladas en rito satánico
- domingo 14 de mayo de 2023 - 12:00 AM
El cadáver de Oristela Batista Barba, de 18 años, fue hallado la madrugada del 8 de diciembre de 1995, Día de las Madres, a la orilla de una carretera ubicada en la comunidad de El Ejido, antes del cruce a Santa Ana de Los Santos. Presentaba al menos 32 puñaladas y no tenía sangre.
Por este horrendo asesinato fueron detenidos los hermanos Frank y Sandy Luzer Pardo, quienes fueron condenados en agosto de 2000 a pagar 20 años de prisión cada uno.
Sandy cumplió con su pena y salió libre el 1 de marzo de 2016, pero Frank se mantiene en prisión, pues el 16 de agosto de 2006 se fugó del centro penal La Joyita y fue recapturado años después en México, por lo que se le aumentó la pena.
Estos hombres habían formado parte del Ejercito de los Estados Unidos.
Brutal crimen
Los hermanos Luzer contaron a las autoridades judiciales que todo inició en medio de la celebración de una misa negra en septiembre de 1994 en un pueblo en Parita, Chitré, provincia Los Santos.
En medio de la ceremonia diabólica un demonio dejó escrito el nombre de Oristela como la joven que había que sacrificar.
‘Un demonio, uno de los pesados, quedó atrapado en este mundo, y la única forma que regresara era a través de una inmolación especial', contó Sandy, uno de los asesinos.
De acuerdo a los homicidas en el ritual participaron 5 brujas estadounidenses, dos colombianas y una darienita.
La noche del crimen, a eso de las 11:30 p.m. del 7 de diciembre de 1995, vísperas del Día de las Madres, Oristela se encontraba en un evento donde había música, pero después de un rato le dijo a su madre, Ana Barba, que se iba para la casa, ubicada a unos 20 minutos y se fue sola.
Cuando pasaba cerca de un taller de mecánica, cinco personas, entre hombres y mujeres la interceptaron y la obligaron a subir a un auto y se le llevaron.
La condujeron a la playa Los Guayaberos, lugar donde se le practicó el rito satánico.
Los plagiadores colocaron a Oristela en medio de velas y finalmente la asesinaron propinándole 32 puñaladas en distintas partes de su cuerpo.
Los investigadores contaron que las heridas eran tan profundas que le perforaron el pulmón y el corazón. También le cortaron las cuerdas bucales para evitar que siguiera gritando pidiendo auxilio.
Tras asesinarla, los homicidas abandonaron el cadáver en una cuneta a orillas de la vía que conduce a Las Tablas.
La Policía Nacional la encontró tirada boca arriba, las manos colocadas juntas en el pecho. A su alrededor no habían insectos ni en su cuerpo salía una gota de sangre.
Aceptó crimen
Durante una entrevista que se le hizo a unos de sus asesinos, Sandy Luzer, este aceptó el crimen.
'Yo acepto que asesiné a Oristela Batista en ritual satánico. Lo acepto. También es cierto que la víctima fue encontrada sin ninguna gota de sangre'.
Luego añadió fríamente:
‘Digamos que son cosas que tuvieron que suceder... tenía que ser ella... La joven, quien jugó la Ouija, soñaba constantemente con el diablo y fue por eso que la inmolamos".
La autopsia reveló que Oristela Batista no fue atacada sexualmente, su virginidad estaba intacta. Ambos hermanos fueron capturados meses después del crimen, en 1996. En 1997, la fiscalía pidió el enjuiciamiento de los hermanos. Según la Fiscal Nedelka Díaz se trataba de un crimen pasional, ya que, supuestamente, Frank Luzer Pardo había invitado a bailar a Oristela, pero esta se negó y por venganza, decidió matarla, con la ayuda de su hermano.