Los crímenes más espantosos de octubre

  • viernes 01 de noviembre de 2024 - 12:00 AM
Trágica equivocación

El mes comenzó con el doble homicidio de Francisco Flores y Alma Shedrack, una pareja de 50 años, quienes fueron asesinados en su hogar en La Chorrera. Investigaciones posteriores revelaron que los sicarios se habían equivocado de víctimas.

Lluvia de balas en un taller

El mismo 2 de octubre, tres hombres fueron acribillados a balazos en un taller en San Isidro, San Miguelito. Las víctimas, identificadas como Víctor Ortega, Francisco Carrera y Gittens Reina, de 34 años, fueron atacadas por sujetos armados que llegaron en un vehículo. Sus asesinos aún no han sido capturados.

El hijo que se convirtió en asesino

El 12 de octubre, Roberto Ávila, de 56 años, conocido como “Cojo”, fue asesinado por su hijo de 22 años en Chepo. La tragedia ocurrió tras una discusión, durante la cual el padre, bajo los efectos del alcohol, agredió a su pareja, lo que llevó a su hijo a intervenir, resultando en un fatídico desenlace.

Le arrebataron la vida en riña

Erika Kay, de 17 años, fue asesinada el 13 de octubre tras una pelea con otra joven por un hombre. En medio del altercado, un sujeto disparó para separarlas, hiriendo fatalmente a Erika en la cabeza. Estudiante en su último año, su muerte dejó un vacío en su comunidad.

Madre, víctima de balacera

Likenerly Villarreal falleció la tarde del 13 de octubre en una balacera que se suscitó en Santa Ana. Cuando salió a investigar una pelea donde se encontraba su hermano, unos pandilleros dispararon y fue alcanzada por una bala en la espalda. Murió dejando huérfana a su hija de dos años.

De esa manera la violencia truncó los sueños de esta joven madre que quería continuar sus estudios universitarios.

Desaparición y hallazgo trágico

Juan David García, de 16 años, un chico con discapacidad auditiva , desapareció la tarde del 4 de octubre cuando fue visto por última vez en la terminal de buses de Albrook luego de salir de su colegio. Tras una búsqueda desesperada de su madre, 12 días después fue hallado muerto en un edificio abandonado en Curundú. Su cuerpo presentaba una puñalada en el cuello, estaba amarrado y amordazado. Un pelao de 15 años está preso por este brutal asesinato.