La pesadilla se convirtió en realidad, recuperan cuerpo

En una operación que mantuvo en vilo a toda la comunidad, las autoridades confirmaron el hallazgo del cuerpo sin vida de Pablo Guerrero Ortiz, de 45 años, quien había desaparecido el pasado domingo por la noche en el río Chorcha, en Matarrica de Gualaca, provincia de Chiriquí.

Lo que había comenzado como una reunión laboral se tornó en tragedia cuando Guerrero, según testigos, resbaló en la orilla del río, que en ese momento estaba crecido por las intensas lluvias. La caída desde una altura de 30 metros lo sumergió en las aguas embravecidas, siendo arrastrado por la fuerte corriente.

Desde el instante de su desaparición, el Sistema Nacional de Protección Civil (Sinaproc), junto a miembros de la comunidad y el representante del corregimiento de Rincón de Gualaca, Esteban Madrid, emprendieron una búsqueda sin descanso que culminó la noche del martes.

Los rescatistas enfrentaron grandes retos para dar con el cuerpo, uno de ellos fue la geografía de la zona y el otro la fuerza del río, lo que dificultó el acceso y la movilidad de los equipos de búsqueda. A pesar de las condiciones adversas, la esperanza de encontrar a Guerrero se mantuvo firme hasta el último momento.

El cuerpo fue hallado a unos kilómetros del lugar donde fue visto por última vez, poniendo fin a la angustia de familiares y amigos, quienes desde el inicio se volcaron a apoyar en las labores de búsqueda.

Sinaproc hizo un llamado a la comunidad a extremar precauciones durante la temporada de lluvias, especialmente cerca de ríos y quebradas, para evitar más tragedias como la ocurrida en el río Chorcha.