¡Salvaje! Le cayó a puñetazos a su expareja hasta matarla

En un oscuro rincón de Dublín, el 14 de diciembre de 2019, se desató una pesadilla que terminaría en el trágico asesinato de Nadine Lott, una mujer de 30 años, a manos de su expareja, Daniel Murtagh. En un ataque brutal y desenfrenado, Murtagh, un boxeador entrenado, sometió a Lott a un “ataque violento y sostenido” que dejó su huella en la historia de la violencia doméstica en Irlanda.

Lott fue víctima de un asalto que no solo involucró puñaladas, sino también un salvaje golpeo a mano desnuda y con un cargador de bomba de neumáticos. Las heridas fueron tan devastadoras que la mujer nunca recuperó el conocimiento y, tras recibir 18 litros de sangre en 24 horas de hospitalización, sucumbió a sus lesiones el 17 de diciembre.

La relación entre Nadine y Murtagh comenzó en Australia en 2012 y estuvo marcada por altibajos y separaciones. Nadine viajó a Darwin, Australia, donde trabajaba en un salón de belleza y allí para su desgracia conoció a Murtagh. Iniciaron una relación allí, pero no duró. Lott regresó a Irlanda a mediados de 2013, y Murtagh la siguió poco después.Por esa época, dio a luz a su única hija, a la que llamó Kya.

Según se informa, Lott y Murtagh mantuvieron una relación intermitente durante varios años. En agosto de 2016, Lott y Murtagh planearon mudarse juntos a una casa en Arklow, Condado de Wicklow. Cuando Murtagh no llegó el día de la mudanza, Lott terminó la relación definitivamente.

A pesar de haber tenido una hija juntos, Kya, la relación se volvió tóxica y terminó en un ciclo de violencia. Murtagh, incapaz de aceptar el fin de su relación, atacó a Lott en su propio hogar.

La noche del ataque, los gritos de Lott fueron escuchados por su vecina, quien, al entrar al apartamento, se encontró con una escena macabra: Lott tendida en el suelo, rodeada de muebles destrozados y un charco de sangre. Murtagh, descrito como un “animal salvaje” por testigos, continuó su ataque sin piedad, dejando a Lott en un estado irreconocible.

Cuando finalmente llegó la policía, el horror se hizo palpable. Los paramédicos que atendieron a Lott describieron la escena como una de las más horrendas que jamás habían presenciado. Con lesiones faciales extremas y grotescas, Lott fue llevada de urgencia al hospital, donde su madre, al llegar, no pudo reconocer a su propia hija.

Un guardia que acudió al lugar de los hechos, describió a Lott como “golpeada hasta la muerte”.

Al llegar al Hospital St Vincent de Dublín, se observó que Lott tenía fragmentos de madera y un plato de comida pegados a su cabello ensangrentado.

Las enfermeras no pudieron lavarle el cabello por temor a que la hemorragia empeorara. En sus primeras 24 horas hospitalizadas, Lott recibió 18 litros de sangre.

El día del ataque, Murtagh huyó del lugar, estrellando su coche en una zanja. Al ser encontrado, confesó a un transeúnte que había “matado a su esposa” “ y luego le dijo al paramédico que había matado a su novia, una declaración que resonaría en los oídos de todos los que conocieron la historia de Nadine.

Fue trasladado al hospital de Tallaght, donde fue arrestado-4

En la fecha de la agresión, Murtagh vivía con sus padres en Clondalkin, condado de Dublín, y Lott vivía en el apartamento de ella en Wicklow.

El juicio de Murtagh fue un espectáculo de horror. A pesar de que se declaró culpable de homicidio involuntario, alegando estar demasiado intoxicado para tener intenciones claras, el jurado no compró su defensa.

El 5 de agosto de 2021, fue declarado culpable de asesinato y recibió una condena de cadena perpetua el 4 de octubre del mismo año.

El caso de Nadine Lott demuestra la violencia que muchas mujeres enfrentan y la urgencia de abordar la violencia doméstica en todas sus formas. Su historia, marcada por el dolor y la pérdida, continúa resonando en la lucha por la justicia y la protección de quienes no pueden defenderse.