La estranguló y violó, ahora quiere protección en la prisión

‘Señora Juez, quiero saber si voy a tener protección en la cárcel', fueron las palabras que dijo Juan Carlos Jiménez Miranda, a quien le decretaron su detención por el femicidio y violación de Mirna Estela Gallardo Rodríguez, de 68 años de edad, a quien enterró en el patio de su casa.

Según las investigaciones, Mirna fue vista por última vez a las 7:30 de la mañana del 30 de agosto, en la caseta de espera ubicada al lado de la vivienda del acusado.

La necropsia reveló que falleció a consecuencia de asfixia por compresión cervical y fue víctima de violación sexual, de esta misma forma acabó con la vida de María Guerra, de 9 años, el 24 de octubre de 1996 en el Kilómetro 32, en Barú, Chiriquí.

El 30 de agosto a la 1:00 de la tarde, el imputado le pidió kangaru a un vecino y luego fue al supermercado a comprar más, con el propósito de que sus vecinos no sintieran el olor de la descomposición del cuerpo.

Mirna estaba envuelta en una sábana, cubierta con plástico y amarrada con soga. Sobre el cadáver habían hojas de tallos, ramas de veraneras, llantas viejas, latas de cerveza y otro tipo de basura, que presuntamente quería quemar para borrar las evidencias.

Este depravado también había sido acusado por su sobrina, por acosar sexualmente a su hija que es menor de edad.