El asesino de Adrián anda suelto
- lunes 11 de noviembre de 2024 - 12:00 AM
Adrián Solís solo tenía 26 años y era bailarín . Soñaba con viajar con otros artistas tanto a nivel nacional como internacional.
Sin embargo, la noche del domingo 3 de noviembre, cuando se celebraba la separación de Panamá de Colombia, un menor le disparó en el rostro y en cuestión de segundos acabó con sus sueños y con su vida.
El episodio violento ocurrió a eso de las 8:00 de la noche cuando Adrián se encontraba en las afueras del edificio donde residía desde hace dos años con su pareja, en calle 26 El Chorrillo. Allí con él, además de su esposa, estabansu suegra y sus hijos. Permanecían platicando mientras su suegra vendía ‘saus’. Nadie presagiaba lo que estaba a punto de ocurrir. Adrián le dijo de repente a su esposa que iría a comprar un cigarrillo, se levantó y cuando cruzaba la calle un pelao borracho se le acercó y le disparó en la cara.
Adrián se desplomó en el piso en medio de los gritos de sus familiares. Su esposa salió corriendo para auxiliarlo. Adrián estaba inconsciente tirado en el pavimento.
“Yo estaba encima de él, hablándole. Yo le decía: ¡Párate, Adrián! ¡Párate!”, contó su cónyuge en medio del llanto.
Tras ser baleado familiares lo trasladaron en auto particular al hospital Santo Tomás, donde falleció a eso de las 3:00 de la madrugada del lunes 4.
La suegra de Adrián le contó a El Siglo que la noche del crimen estaban vendiendo saus y no tenían problemas con nadie. Aseguraron que no tenían enemigos.
“Estábamos tranquilos. Éramos puras mujeres. Adrián se movió para ir a comprar cigarrillo y fue entonces cuando el menor le disparó. Cuando nos dimos cuenta, ya estaba en el piso. Lo recogimos y lo llevamos en auto al hospital”, dijo la mujer.
Adrián era bailarín del cantante Alberto Nilez, conocido en el ámbito musical como “TOT”, un artista que ha revolucionado el guetto por sus letras.
Desde adolescente Adrián había pertenecido al grupo de Las Hienas de Colón y su mayor sueño era viajar con otros artistas.
Dejó 3 hijos y esperaba que renovaran el contrato de trabajo en una empresa en la Autoridad del Canal de Panamá (ACP).
Los que lo conocieron lo describieron como un chico bondadoso y que se llevaba bien con todos los vecinos.
En cuanto al presunto asesino, este se mantiene prófugo. Una fuente policial dijo a El Siglo que el atacante fue señalado por testigos como un menor conocido en el barrio con el alias de “Manito de gancho”.
Parientes de la víctima, en medio del dolor y la impotencia, piden justicia por la muerte de Adrián y que se capture al culpable.
Parientes denunciaron que hubo negligencia en el manejo del caso de Adrián, pues nunca lo operaron.
“Cuando llegó al Santo Tomás él respiraba, quería hablar. A las 11:00 de la noche dejaron pasar a la esposa y no lo habían operado”, contaron molestos.
La esposa le preguntó a la enfermera que por qué no lo habían operado después de tantas horas.
“ Lo vi entubado y todavía botando sangre por la boca, me acerqué al doctor y le dije que estaba botando demasiado sangre y que si eso no lo afectaba y por qué no lo operaba. El médico me respondió que había que esperar al cirujano. Luego le volví a insistir que por qué no lo operaban y me dijo que si tenía 50 mil dólares lo llevara a otro lado. A las 3 de la mañana nos dijeron que había muerto. Nunca lo operaron. Lo dejaron morir por negligencia”, aseguró la joven.