Se dirigía a la escuela, ocurrió un derrumbe y una roca lo mató

Un lamentable hecho que deja en evidencia el peligro que corren cientos de niños en áreas de difícil acceso, fue la muerte del estudiante Antonio Santos Bejerano, de 13 años de edad.

Este pequeño perdió la vida el pasado lunes 17 de abril, cuando una enorme roca le cayó encima, en momentos que se dirigía al centro educativo, ubicado en Buena Vista, en la comarca ngäbe.

Cursaba el quinto grado de la escuela de Buena Vista, en el corregimiento de Jadeberi, del distrito Nole Duima, salió aproximadamente a las 9:00 de la mañana de su vivienda, en dirección al centro educativo, en un trayecto que tardaría unas tres horas.

No obstante, aproximadamente a las 11:30 de la mañana, por razones que aún se investigan, ocurrió un derrumbe y una piedra golpeó al menor en la cabeza, causándole la muerte, de forma instantánea.