Dinero: principal razón de violación de migrantes
- martes 23 de abril de 2024 - 12:00 AM
Las violaciones de mujeres y niñas migrantes en su travesía por la frontera de Darién y denunciadas por Médicos Sin Fronteras, podría estar ligada al tráfico humano, y a la venta de mujeres y niñas por parte de sus propios parientes por dinero, según especialista.
Jorge Govea, director del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), entidad encargada de custodiar la seguridad en nuestras fronteras, en remplazo de la pregunta de presuntas violaciones de mujeres y niñas perpetradas pos unidades bajo su mando, respondió que “la puesta en marcha de la operación Chocó 2, ha dado resultados contundentes, específicamente contra estructuras criminales que han intentado utilizar la migración como una fuente de lucro y abastecimiento: señaló que es el Clan del Golfo el encargado de administrar la migración que entra a Panamá”.
El funcionario advirtió que este grupo en organización con panameños, latinos, indígenas y colombianos intentan abrir rutas por el territorio panameño para movilizar migrantes explotándolos y creando campamentos clandestinos no autorizados.
En tanto, Samira Gozaine, directora del Servicio Nacional de Migración, alegó que “informes negativos y las crisis son los que le genera más fondos a estos grupos”.
La psicóloga clínica, Geraldine Emiliani, pone en duda las acusación de violación de mujeres y niñas por parte de miembros del estamento policial, ya que estos son entrenados para cumplir con su misión donde quiera que se les mande.
"En muchos casos los que emigran a otros países, las mujeres suelen venderse y, en esos lugares remotos se da mucho la venta de las niñas y esta puede ser para esta gente del Senafront como para cualquier otro”.
Agregó que tanto la venta de mujeres, la trata de personas y todo lo relacionado tiene un precio, por ende, debemos preguntarnos ¿Por qué se exponen mujeres con niñitas a una travesía tan larga y peligrosa, arriesgándolo todo incluyendo enfermedades? Es como buscar la muerte, dijo.
Frente a este escenario, el criminólogo forense, Marcos Aurelio Álvarez, añade que "en contextos de poder desbalanceado, como es el caso de agentes de la autoridad frente a migrantes, puede ocurrir una deshumanización de las víctimas. Los perpetradores pueden ver a las víctimas no como individuos con derechos, sino como objetos disponibles para la explotación.
Esta mentalidad es facilitada por estructuras de poder y puede ser exacerbada por prejuicios existentes hacia los migrantes. Además, la exposición a material pornográfico que dispara de manera incontrolable la violancia sexual en instituciones como las fuerzas policiales puede ser sintomática de una cultura más amplia que tolera o incluso encubre la agresión y explotación, revela el especialista.
En conclusión, desde un punto de vista ético y legal, ningún factor emocional o circunstancial justifica la violación o el abuso sexual. El argumento de la “necesidad sexual” no es válido legal ni moralmente como justificación para perpetrar un acto violento y violatorio de los derechos humanos.