‘Sin voluntad, no habrá nuevo reglamento en la AN' Ana matilde Gómez

Ana Matilde Gómez, decana de la Facultad de Derecho de la Universidad Santa María La Antigua y exdiputada de la nación, considera urgente y necesario el cambio en el reglamento interno de la Asamblea Nacional, pero debe haber al mismo tiempo la voluntad de sus miembros en tener actitud de cambio o de lo contrario será una discusión estéril.

¿Cómo ve la discusión de reformar o modificar el reglamento interno de la Asamblea Nacional?

Mientras que no exista la convicción o el convencimiento en cada uno de los miembros que tienen que debatir en primer lugar qué es la Comisión de Credenciales respecto a la importancia de contar con una barrera de contención para la conductas no apropiadas, o contar con un documento que permita vía la sanción de corregir conductas no se va a producir el resultado que se quiere con el reglamento.

¿Sigue la población muy de cerca lo que va a ocurrir con los diputados?

De no producirse el cambio al reglamento interno, no están entendiendo la demanda ciudadana que hay sobre las figuras que los representan. Esa aspiración del pueblo en ver al servidor público como un modelo o referente, se está perdiendo así que ya que no se corrigen solos deberá hacerlo el reglamento.

¿Cuál sería una de las fallas principales de los diputados?

Una vez que logran el voto popular y la representación se desconectan de ese pueblo y lamentablemente muchos piensan que dicho contacto debe ser asistencial. El sistema está construido para que en vez de que hayan oportunidades existan necesidades y porque debe ser un diputado.

¿Cuáles serían los cambios necesarios en este reglamento interno?

Hay muchos en muchas áreas porque tiene que ver con desempeño, la conducta, la transparencia y la rendición de cuentas. Entonces en cada una de estas líneas de acción hay normas que desarrollar para que existan los controles correspondientes, en la forma como se contrata, la forma como cumplen con el horario de trabajo, la forma como disponen de los bienes, etcétera.

¿Se deben reducir algunos beneficios que tienen los diputados?

Hay prerrogativas que son más allá que funcionales no tienen nada que ver con las funciones propias de legislar, por lo que hay mucho más que se puede recortar para lograr mayor eficiencia.

¿Cómo ve los recientes escándalos por nombramientos de familiares de diputados en la Contraloría General de la República?

En lo que corresponde a tráfico de influencias de por medio, es evidente que si sus familiares son militantes del partido gobernante y no se tiene una carrera administrativa que se respete esta situación seguirá lamentablemente.

¿Cómo ve el ‘mote' de ‘cueva' para uno de los órganos del Estado?

Yo creo que tristemente se llega a esa degradación o a ese nivel de desprecio por referirse al primer órgano del Estado, porque hablamos del primer Órgano del Estado, porque es realmente donde se ejerce la democracia al representar a otros y los diputados no logran entender que cuando hay tal nivel de desconexión entre lo que se hace y lo que aspiran los ciudadanos. Es urgente cambia el rumbo.

¿Es necesaria la modificación al reglamento interno de la Asamblea?

Por supuesto y se requiere corregir cuanto antes, pero como no se tiene una actitud voluntaria de la persona de cambiar actitudes y debe surgir entonces mecanismos que repriman o que de alguna manera limiten los espacios de discrecionalidad.

¿Cómo percibe usted la relación o vínculo entre el Órgano Ejecutivo y el Órgano Legislativo?

Al principio parecía que había una ruptura desde el punto de vista de fuerza política y el epicentro del poder no estaba en el Ejecutivo sino en el legislativo y al tener una bancada mayoritaria, no hay duda que el Ejecutivo necesita de dicha bancada para el logro de sus planes y metas a partir de sus promesas de campaña.

‘Ojalá esa necesidad no se base en una simbiosis macabra de perversión que esté relacionada con los beneficios económicos como: cuotas de nombramientos o viajes', dijo la exdiputada.