“Todas las actividades tienen que ajustarse”, Gil

Ya es 3 de enero y aún no se ha definido el nuevo salario mínimo, lo que genera incertidumbre entre los trabajadores que ven el tema estancado.

La ministra de Trabajo, Doris Zapata ayer hablo sobre el tema y expresó que “aspiramos no a un salario mínimo, sino a un salario justo para los panameños. Puedo pensar que en algunas actividades económicas habrá ajustes”.

El primero que salió al paso fue Eduardo Gil, dirigente de Convergencia Sindical, quien aclaró que hablar de algunas actividades es inaceptable.

“Todas las actividades económicas tienen que ajustarse conforme al costo vida, que se ha incrementado y se ha afectado el poder adquisitivo de los trabajadores; esto afecta la economía y genera consecuencias sociales”, enfatizó.

Aunque las declaraciones de la ministra no sorprendieron a Gil, ya que el actual gobierno fijó el ajuste más bajo en tema de salarial. Espera que este año corrija eso, porque para los empresarios nunca habrá condiciones para ajustar el salario mínimo, a pesar de que sus ganancias siguen creciendo, tal como lo reflejó el informe del presidente de la República, Laurentino Cortizo, que señala que Panamá lidera el crecimiento económico en la región.

Prueba de ello, según Gil, es que durante las últimas cinco comisiones los empresarios no han presentado ni sustentado ninguna propuesta.

El dirigente explicó que el salario debió entrar en vigencia el 1 de enero, pero por los cierres de calles y manifestaciones, que se dieron entre octubre y noviembre del 2023, no se entregarán los informes a tiempo; pero que esperan que el mismo entre en vigencia en la segunda quincena de este mes.

La ministra Zapata aclaró que los empleadores y trabajadores presentaron sus conclusiones, pero que ahora corresponde al Gobierno tomar la decisión, teniendo en cuenta que son 53 tasas de salario con 73 actividades.

Calcula que a finales de esta semana o a principios de la próxima podrían darse las corridas correspondientes y podría estar entrando a regir en la segunda quincena del mes de enero.

Para el consultor laboral, René Quevedo, la fijación de un salario mínimo debe conjugar un acto de justicia social, ante el notable aumento en el costo de la vida, con la sostenibilidad financiera de las empresas, en una economía que no genera empleos formales.

Hay que resaltar que el último ajuste, con un aumento de entre 1,5 % y 13 % fue decretado en el 2021 por el Ejecutivo solo para los sectores que habían logrado una recuperación pos pandemia.

Las actividades económicas con ajuste fueron agricultura, caza, ganadería y silvicultura (1,5 %); explotación de minas y canteras (1 %); actividades de servicios sociales, financieras y salud privada (2 %); construcción (1 %); suministro de electricidad, gas y agua (2 %), y las bananeras (13 %). Los sectores cuyo nivel salarial quedó sin variación fueron la hostelería, restaurantes, y el comercio en los que se encuentran la mayoría de las pequeñas y medianas empresas del país.