Psicología y ‘pandemia' .......... una opinión

Mark Twain dijo: ‘es más fácil engañar a la gente que convencerlos de que han sido engañados'. Mi intención no es convencer a nadie, de nada; mi propósito siempre ha sido motivar la reflexión. Se advierten indicios de probabilidad de ser víctimas de un fraude colosal, mismo que, a nivel planetario, tradujo daños severos e irreparables, sobre todo en la economía, la salud y la educación. Escenario en el que destacan tres protagonistas, la gran industria farmacéutica, los gobiernos y los medios de comunicación. Dijeron que la pandemia causaría numerosas víctimas, con muchos muertos; que el sistema sanitario colapsaría; restringieron las libertades públicas y el acceso a la información, la cual manipularon a discreción; utilizaron tanto la propaganda como la censura y la represión; prohibieron las autopsias, rechazaron los protocolos de tratamiento, de médicos que no siguieron el guión y lo peor, muchos ‘servidores' se aprovecharon para reafirmar su destreza en el arte de saquear al fisco. En el contexto de la agenda globalista, recurrieron a las operaciones psicológicas, empleando conocimientos de sociología, psicología y de salud pública para alinear la conducta de la población; el ‘estado de emergencia' y el alarmismo generó el terror, que bloquea el razonamiento, luego la propuesta y publicidad de soluciones hicieron el resto; el temor al contagio y a ser internado en un hospital sin camas, sin ventiladores ni insumos, generó ansiedad, depresión y hasta suicidios; en semejante escenario implorar por la salvación, que afirmaron serían las ‘vacunas' se convirtió en clamor; el recibimiento tuvo cobertura completa. Y aunque la gripe estacional ‘desapareció', los resultados parecieron no llenar las expectativas, en el centro para la seguridad de la salud, de la Universidad Johns Hopkins, de Nueva York, donde, seis semanas antes de que se registrara el primer caso, reportado en China, hicieran un ejercicio para enfrentar la ‘pandemia de Covid 19', ahora coordinan el manejo de lo que llaman ‘entorno de la desinformación'; porque todo desacuerdo o cuestionamiento, lo catalogan de anti científico o de conspiración; como si tuvieran el patrimonio exclusivo de la verdad y la razón; todo menos debatir el tema, confrontar los hechos, las ideas, la metodología, la información bioestadística, etc., sin exclusión ni dogmatismos, de modo que facilite confirmar o descartar la conspiración o el terrorismo del que acusan a quienes cuestionamos el manejo establecido. Goebbels dijo, con meridiana claridad: ‘la mentira solo puede mantenerse mientras el Estado pueda proteger al pueblo de las consecuencias políticas, económicas y/o militares de la mentira. Por lo tanto, se vuelve de vital importancia para el Estado utilizar todos sus poderes para reprimir la disidencia, porque la verdad es el enemigo mortal de la mentira y, por tanto, la verdad es el mayor enemigo del Estado'. Martin Luther King dijo: ‘No me preocupa el grito de los violentos, de los corruptos, de los deshonestos, de los sin ética. Lo que más me preocupa es el silencio de los buenos'. Rehúso pensar siquiera que el mutismo de las otrora respetables asociaciones médicas, sea por complicidad, prefiero considerar aturdimiento, por el probable crimen de lesa humanidad. Pronto reaccionarán, espero; incluso junto a las sociedades de especialistas y a los Comités de Bioética. Reitero: la Universidad de Panamá, conciencia crítica de la nación, debe abrir sus puertas, convocar y organizar el debate...Aceptarán la propuesta? ¿Usted qué opina?