'El pecado de Noriega fue su relación con los narcos'
- lunes 05 de diciembre de 2011 - 12:00 AM
Dirigió la Guardia Nacional (GN) y fue jefe del entonces coronel Manuel Antonio Noriega (MAN). Lanza una sonrisa cuando se le menciona la palabra ‘traición’. Se trata del general (r) Rubén Darío Paredes, quien asegura que al entregar el mando a MAN, en 1983, le dejó un país en calma y sin presos políticos. Afirma que MAN fue uno de los que complotó en el proyecto para sacarlo de la arena política tras su retiro y que el ‘pecado’ mayor del exdictador fue abrirle las puertas al narcotráfico. Lo culpa, a su vez, de arrastrar al país a la invasión de EE. UU.
Ante la inminente extradición de MAN desde Francia, Paredes habló a El Siglo de la vida, ‘errores y vicios’ en los que cayó su ex compañero de armas durante el régimen que encabezó entre 1983-1989.
El Siglo (ES): ¿Cómo inició y evolucionó su carrera en la GN?
Rubén Darío Paredes (RDP): Me gradué en la academia militar de Nicaragua como subteniente de infantería. Ingresé a la GN en septiembre de 1957, pasé por todos los rangos hasta alcanzar el máximo de comandante. Mi retiro llegó en 1983. Allí le correspondió sucederme en el mando a MAN. Yo le entregué la GN y el país sin ningún preso político, no había nadie en el exilio, ni manifestaciones, le entregué un país en calma.
ES: Usted dura dos años al mando de la GN. ¿Qué motivó su retiro?
RDP: Nosotros veníamos cumpliendo con una intención del general Omar Torrijos, que él denominó como ‘el repliegue’ de todos los uniformados de los cuarteles para que la clase política gobernante asumiera poco a poco el control. El gobierno en ese momento consideró que Paredes, general retirado, tenía potencial y la aceptación para correr como candidato en las elecciones de 1984, pero el grupo de oficiales encabezados por Noriega, que al principio nos apoyaron, fueron víctimas de ambiciones y se convirtieron en complotados contra ese proyecto; yo salí del escenario y ellos escogieron a Nicolás Ardito Barletta.
ES: ¿Cree usted que MAN lo traicionó?
RDP: Lo que ellos incumplieron fue el proyecto político [entre risas... ese término de traición suena feo]. Yo representaba al gobierno. Ellos se asustaron porque Arnulfo Arias nos manifestó que iba a bajar su candidatura para apoyarnos y eso, más la fuerza de la GN, les preocupó, porque el siguiente paso era que ellos tenían que sacar las manos del manejo político del país. Ellos no estaban dispuestos a soltar el poder. Se contaminaron y no cumplieron su palabra.
ES: Antes de todos estos hechos, ¿cómo fue su relación con Noriega?
RDP: Era una relación normal de un jefe con un subalterno que comparten horas en el servicio y el cumplimiento del deber. Las relaciones profesionales en el cuartel eran buenas y correctas. Pero cada uno tenía su círculo de amistades.
ES: MAN fue agente importante del G-2 y la CÍA. ¿En qué momento empieza a relacionarse con los narcotraficantes?
RDP : Cuando me enteré de que MAN era miembro de la CÍA, yo ya estaba retirado, nadie en Panamá sabía que él era de la CÍA, sé eso porque él mismo lo dijo. Noriega, siendo mi subalterno, nunca dio muestras de que estaba involucrado con carteles de la droga. Cuando uno es jefe de seguridad, uno tiene esos contactos, por razones de trabajo, lo malo es cuando tú te quedas en medio de estos. El narcotráfico de Noriega vino a Panamá a traernos problemas.
ES: ¿Cuál fue el peor error de MAN?
RDP: El pecado de Noriega fue su relación con los narcotraficantes. Él se quedó con ellos y una vez llega al poder, reactivó esa relación para su propio provecho y su enriquecimiento y por eso las cosas terminan así.
ES: Luego de su retiro, ¿usted se comunicó con MAN, le advirtió del peligro al que estaba llevando al país?
RDP: Nunca le llamé ni me comuniqué con él, pero como yo siempre he tenido acceso a los medios desarrollé como seis artículos con los que le advertía el peligro a donde estaba llevando al país, sacrificando a la GN.
ES: ¿De quién fue la culpa de que EE.UU. invadieran a Panamá?
RDP: La responsabilidad fue de MAN y todo su equipo de gobierno, el Estado Mayor y los civiles del Gabinete. Ellos retaban a EE.UU. en sus intervenciones públicas. Pensaban que no se atreverían a invadirnos y cayeron en excesos. Noriega había entregado la institucionalidad del país al servicio del narcotráfico. La droga fluía con gran libertad hacia el Norte y eso tenía a los norteamericanos preocupados y fue así como reaccionaron.
ES: ¿MAN fue capturado por EE.UU. o él decidió entregarse?
RDP: Cuando Noriega se entrega es porque decidió no pelear. Fue un retador que a la hora de subir al ring se acobardó y prefirió entregarse a EE.UU. en vez de a los panameños, porque su vida corría peligro. Entregarse a Panamá tenía muchos riesgos porque había un pueblo enardecido, saturado de los abusos del norieguismo.
ES: ¿Es MAN responsable de todas las desapariciones de que se le acusan?
RDP: Claro que todo fue por orden de MAN; lo que pasa es que hay que aportar las pruebas, porque es muy cómodo decir que él no estaba en el país cuando le quitaron la cabeza a Hugo Spadafora y fusilaron a los 9 jóvenes. ¿Qué subalterno va a incurrir en semejante atrocidad sin tener el respaldo de un superior? MAN estaba al frente de la comandancia y podía dar la orden desde Rusia si quería.