El presidente panameño José Raúl Mulino reaccionó a las críticas por la aparente opacidad en torno a la recepción de migrantes deportados enviados desde Estados Unidos, hospedados en un hotel de la ciudad capital, con denuncias de fuga y hasta supuesto intento de suicidio de un migrante.

“Por favor, aquí no hay nada escondido. Dejen el morbo para otra cosa.... Hay mucho morbo, mucha mentira circulando. Eso está estrictamente vinculado a la Organización de Migraciones y a la ACNUR (Agencia de la ONU para los Refugiados)”, dijo hoy el mandatario en su conferencia semanal.

Agregó que el Gobierno de Panamá “solo fue fiscalizador y cuida las instalaciones, más nada. Y se asegura, pues, que el tránsito a las distintas zonas sea seguro, y custodiado como debe ser”.

El presidente también se mostró sensible ante pregunta de La Estrella de Panamá, por esta opacidad. “Aquí no hay nada de opacidad... voy a subirlo a la página web”, indicó.

Mulino también confirmó que la migrante china que se fugó del hotel Decápolis fue rescatada en territorio de Costa Rica y ya está de vuelta en Panamá.

También reveló que de los 170 migrantes que estaban en el hotel Decápolis, 97 ya fueron enviados a campamento en Darién, y el resto está en trámites para volver a sus países.