Mulino lanza plan para nombrar docentes en línea en medio de aulas vacías

En medio de la huelga docente que inició el pasado 23 de abril y que aún no tiene una salida clara, el presidente José Raúl Mulino anunció la reactivación del sistema de postulación en línea para los nombramientos docentes.

El anuncio se da mientras cerca del 45 % de los estudiantes del sistema público continúan sin recibir clases, según cifras del propio Ministerio de Educación (Meduca).

La medida, según Mulino, busca garantizar la transparencia en la selección de educadores y dejar atrás “la palanca política, gremial o de amigos”. “La selección de educadores debe basarse exclusivamente en el mérito y la idoneidad profesional”, recalcó.

Mientras el presidente lanza su nuevo plan, la educación pública sigue paralizada. Los docentes mantienen firme su postura: no regresarán a las aulas hasta que se derogue la Ley 462, que reforma la Caja de Seguro Social (CSS), aprobada el 18 de marzo. “La lucha sigue y no vamos a ceder”, declaró el dirigente magisterial Diógenes Sánchez, quien ayer participó en una caravana bajo la consigna: ¡No a la reforma de la CSS!

Mulino expresó su preocupación por el impacto de la huelga, señalando la creciente brecha entre los estudiantes de escuelas privadas y los del sistema oficial. “Más grave aún es que hay padres de familia que están auspiciando la huelga al no enviar a sus hijos a clases; eso es imperdonable. Los únicos que pagarán los platos rotos serán los estudiantes. Por más que se hable de recuperación, no es igual a recibir clases todos los días”, advirtió.

A pesar del conflicto, el mandatario reconoció el compromiso de muchos educadores que han retomado sus labores. “Los gremios son gremios, expertos en este tipo de situaciones. Pero los educadores como tales son la columna vertebral. Reconozco y agradezco que cada vez son más, casi el 100 %, los que se han reincorporado a dar clases”, destacó.

El descontento con la Ley 462 no se limita al sector educativo. A las protestas se han sumado obreros de la construcción y trabajadores bananeros de Bocas del Toro, en paro de labores desde el 28 de abril; así como gremios de salud, estudiantes y grupos indígenas, que también han salido a las calles para exigir la derogación de la norma.

Organizaciones indígenas han denunciado hostigamiento y persecución por parte de las autoridades. La Coordinadora Nacional de Pueblos Indígenas (Coonapip) ha solicitado una investigación formal a la Procuraduría General de la Nación por presuntos abusos cometidos durante las protestas.

En Bocas del Toro, la situación sigue siendo crítica pese a los más de 4,800 despidos masivos anunciados por la empresa Panamá Chiquita, que atribuye pérdidas superiores a $75 millones al paro laboral.

Mulino fue enfático: la Ley 45, que regula la seguridad social de los trabajadores bananeros, no será enviada a la Asamblea Nacional mientras persistan los bloqueos.

Aunque algunos cierres se han flexibilizado, más de 30 puntos siguen parcialmente bloqueados. Según el presidente, al miércoles se contabilizaban 528 manifestantes activos, cifra que consideró baja. “Ellos sabrán cuándo se aburren o se cansan... Nosotros vamos a enfocarnos en reactivar Bocas”, sentenció.

El Ejecutivo también anunció que una comisión de ministros viajará mañana a la provincia para dialogar con las comunidades y buscar soluciones inmediatas a los problemas de abastecimiento de alimentos, agua y gas, agravados por los cierres.