Inteligencia investiga nexos del Clan del Golfo con tráfico de migrantes
- jueves 05 de enero de 2023 - 12:00 AM
Los migrantes son engañados por grupos irregulares y antisociales colombianos quienes les cobran exorbitantes sumas de dinero con el pretexto de trasladarlos sanos y salvo a territorio panameño y una vez aquí les será más fácil dirigirse al norte.
De acuerdo con un confidente del Ministerio Público, las autoridades panameñas investigan posibles nexos de un grupo perteneciente al crimen organizado colombiano en actividades relacionadas al tráfico de seres humanos en la zona cercana a la frontera entre Panamá y Colombia.
La misma fuente detalla que por razones de seguridad se mantiene cierto hermetismo con este tema, sin embargo, no se descarta que personas nativas de toda la región fronteriza mantengan comunicación y cuerdos con extranjeros que operan al margen de la ley.
Tras las escaramuzas ocurridas el pasado 1 de diciembre, cerca a la frontera colombiana que provocó la detención de ocho miembros de la comunidad Guna, imputados por el presunto delito de tráfico de personas, surgieron protestas de las siete etnias de Panamá arengando arbitrariedades de operativos del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront).
De acuerdo con el cacique Luciano Díaz, del Territorio Ancestral de Takargunyala, ‘el 1 de diciembre el grupo de gunas proveniente de Aquia, Colombia, fueron interceptados por un batallón del Senafront fuertemente armados y los obligaron a tirarse al suelo, los trataron como delincuentes y los acusaron de tráfico internacional de personas a ocho personas".
Díaz refirió que "una unidad de Senafront disparó a mansalva contra uno de los gunas que se mantiene en estado crítico en el hospital Santo Tomás y ocho de ellos fueron detenidos, están recluidos en la Mega Joya y la Joyita.
Cobraron $1,400 por migrante
El director del Servicio Nacional de Fronteras (Senafront), Oriel Ortega, defendió que le llegó información de 60 personas que eran conducidas por ocho gunas.
‘Se le informa la situación a los 60 migrantes, quienes aducen haber pagado mil 499 dólares por persona a los gunas residentes en el lado colombiano, fueron trasladados a pie hasta el puesto de vigilancia de Alto Limón donde helicópteros del Senafront trasladaron a todas las personas hasta las base de Nicanor y como estaban dentro de Panamá y eran de origen colombiano y traían seres humanos fueron presentados al Ministerio Público y este en una audiencia los presentó al juez de garantías quien los imputó'.
A través de un comunicado de prensa el pueblo guna a través de su cacique, dio a conocer el supuesto abuso de autoridad de las unidades del Senafront y catalogaron de actuaciones irregulares las acciones denunciadas arriba, al tiempo que acusaron al gobierno de querer tapar con denuncias infundadas de tráfico internacional de personas y otros delitos que no han podido probar.
En una audiencia de apelación de cambio de medida cautelar realizada la semana pasada, el tribunal de apelación confirmó la medida cautelar de detención provisional de los ocho imputados por el supuesto delito de tráfico internacional de migrantes.
Caso irregular
Puerto Obaldía. Los indígenas detenidos, fueron acusados por los propios migrantes irregulares de haberles cobrado la suma aproximada de 1,400 dólares por persona para transitar por la ruta donde fueron interceptados por unidades de Senafront. El procedimiento policial indica que se debe hacer una verificación de quienes transitan.